Con la salida del presidente Mauricio Macri de la Casa Rosada, el titular del INDEC, Jorge Todesca, ya anticipó al gobierno entrante que planea dejar el organismo después del 10 de diciembre para volver al sector privado y tiene pensado llevarse a parte de la cúpula de la institución.

Esto abre una incógnita para Alberto Fernández, que tenía pensado mantener al funcionario en el cargo, ya que buscará hacer lo necesario para blindar uno de los puntos débiles, o al menos uno de los más cuestionados durante la campaña presidencial: la capacidad que tendrá el próximo gobierno de mantener estadísticas confiables.

Todesca fue uno de los pilares del oficialismo en el rearmado y la recuperación del sistema estadístico argentino. Vale recordar que el INDEC estuvo intervenido entre fines de 2006 y 2015. A partir de una resolución del Poder Ejecutivo, que contó con la firma del entonces Jefe de Gabinete, Alberto Fernández, hubo un cambio en las autoridades en el organismo. A partir de allí, se empezó a subestimar sistemáticamente el dato de inflación. Esto llevó a que la oposición comenzara a confeccionar un índice de precios paralelo, denominado IPC Congreso, que consistía en promediar los datos de diversas consultoras privadas, para tener otro punto de referencia, aunque este indicador fue acusado en algunas oportunidades de sobreestimar los datos de inflación. Otra de las grandes críticas al organismo estadístico durante dicho período, fue el haber discontinuado la publicación de los índices de pobreza e indigencia en 2014.

El nombramiento de Todesca al frente del INDEC, allá por diciembre del 2015, fue interpretado como una maniobra política, dado que el economista se enfrentó a Moreno durante el gobierno kirchnerista y logró su procesamiento. El exsecretario de comercio suspendió a la consultora Finsoport, imponiéndole una multa, y denunció al titular de la misma (Todesca) ante la justicia, señalando que sobreestimaba los datos de inflación. Finalmente, la consultora fue sobreseída y el economista denunció a Moreno, quien terminó siendo procesado en 2013. Desde el 2015, el funcionario ha trabajado con el objetivo de recomponer el sistema estadístico y de perfeccionar algunos indicadores. En esta línea, el Ministerio de Hacienda ya anticipó que enviará al Congreso un proyecto de Ley de Estadística para jerarquizar al INDEC, dándole una mayor independencia, con el fin de garantizar las estadísticas públicas.

Durante la campaña, Fernández destacó que “el INDEC es un termómetro. Vamos a tener uno que funcione bien”. Esto da cuenta de la importancia que le pondrá el gobierno entrante a la confección de estadísticas, intentando no volver a cometer los mismos errores del pasado. Para suceder a Todesca, hay varios nombres dando vueltas. Uno de ellos es Fernando Cerro, ex director técnico del organismo, quien dejó su cargo a mediados del 2018 por cuestiones de salud, dado que tiene una buena relación con los gremios. Cerro llegó al INDEC para reemplazar a Graciela Bevacqua, quien dejó la institución (pasó al Ministerio de Interior), tras mantener algunas diferencias con Todesca con respecto al armado del IPC. Economista de profesión, Cerro se ha desempeñado como Director Nacional de Cuentas Nacionales de la institución en 1999 y fue coordinador en la elaboración de la Matriz de Insumo-Producto de Argentina en 2004 y el nuevo año base del sistema de cuentas nacionales, entre otras funciones.

Otros de los nombres que suenan para liderar el organismo son Daniel Gropper y Alejandro Barrios. El primero ya había sido considerado para ser director del INDEC. Si bien apoyó en su momento la intervención del organismo, ésta mantuvo una postura más laxa que la del “morenismo”, lo que finalmente lo terminó relegando. Por su parte, Barrios ya estuvo al frente del organismo en 2007, pero fue removido por el entonces Ministro de Economía, Miguel Peirano, con el objetivo de recuperar la confiabilidad del INDEC. Lo cierto es que, por el momento, no se ha definido quién será el sucesor de Todesca, pero lo que sí está claro es que el próximo gobierno deberá mantener un sistema estadístico confiable, que permita funcionar como referencia de la evolución de la economía argentina.