Miles de personas salieron ayer a las calles de cinco ciudades de Brasil para protestar contra el gobierno del presidente interino Michel Temer y reclamar el regreso al gobierno de Dilma Rousseff, acusando de “golpistas” a los legisladores que votaron la suspensión de la mandataria en el cargo y el inicio de un juicio político en su contra.

Entre mil y 5 mil personas, según diversas fuentes, marcharon por la avenida Paulista, en el centro de San Pablo, en una manifestación convocada a través de las redes sociales por el Colectivo por la Democracia.

Al pasar frente a la sede de la poderosa Federación de Industrias del Estado San Pablo (Fiesp), los manifestantes cantaron “La Fiesp apoyó la dictadura”.

Asimismo, militantes de organizaciones feministas corearon la consigna “Fuera Temer, vuelve Dilma”, y criticaron el hecho de que el nuevo mandatario haya suprimido los ministerios de Cultura, de la Mujer y de Igualdad Racial.

En Brasilia, entre 200 y 400 personas –según la agencia noticiosa estatal ABR y la Policía Militar, respectivamente– protestaron frente al palacio del Planalto, sede del gobierno federal.

También se registraron demostraciones similares en Belo Horizonte –donde un manifestante golpeó a un camarógrafo y se impidió la cobertura a un equipo de TV Globo, según el diario O Globo–, Curitiba y Florianópolis.

Reunión con sindicalistas

El presidente interino de Brasil, Michel Temer, recibirá hoy a líderes de centrales sindicales para explicarles el sentido de las reformas laborales y previsionales que impulsa, mientras la prensa local afirmó que el nuevo gobierno se propone privatizar la empresa de correos y la Casa de la Moneda, así como la participación que el Estado federal tiene en 230 compañías de electricidad.

Paralelamente, la poderosa Orden de Abogados de Brasil (OAB) reclamó que dejen sus cargos los ministros designados por Temer que están sospechados de corrupción y el diario O Estado de S. Paulo informó que 12 de los 22 miembros del nuevo gabinete recibieron donaciones de empresas involucradas en multimillonario desvío de fondos de la petrolera estatal Petrobras.

Temer convocó para hoy por la tarde a los presidentes de Fuerza Sindical, la Unión General de los Trabajadores (UGT), la Nueva Central, la Central de los Sindicatos Brasileños (CSB), la Central Única de los Trabajadores (CUT) y la Central de los Trabajadores de Brasil (CTB). Las cuatro primeras confirmaron su asistencia en tanto las dos últimas, vinculadas respectivamente con el Partido de los Trabajadores (PT) y el Partido Comunista de Brasil (PCdoB), no habían respondido hasta ayer.

Fuente:Agencias EFE