Barack Obama anunció ayer su apoyo a la candidatura de Hillary Clinton a sucederlo en la presidencia de Estados Unidos, al indicar en un mensaje de video que “estoy con ella”.

Tras una dura campaña primaria en el Partido Demócrata y luego de reunirse ayer con el frustrado aspirante Bernie Sanders, Obama felicitó a Clinton por “hacer historia”.

“Decenas de millones de estadounidenses hicieron oír sus voces. Hoy sólo quiero añadir la mía”, dijo. “No creo que haya alguien tan calificado para este cargo”, añadió.

“He visto su juicio. He visto su firmeza. He visto de cerca su compromiso con nuestros valores”, señaló Obama en respaldo de Clinton. 

El presidente había recibido anteriormente por más de un hora al senador Sanders en el Salón Oval de la Casa Blanca, en un intento por sanar las heridas en el Partido Demócrata. En la reunión, Obama le pidió a Sanders apoyar a Clinton y estrechar filas en el Partido Demócrata para vencer a Trump en las elecciones de noviembre. 

Clinton, por su parte, agradeció la manifestación de confianza de Obama. “Honrada de tenerte conmigo @POTUS”!, tuiteó la exsecretaria de Estado.

“Estoy entusiasmada y lista para dar pelea”, agregó, haciéndose eco de una de las consignas de la campaña de Obama para las elecciones de 2008.
Aquel año, ambos rivalizaron por la candidatura demócrata en las primarias, que Obama ganó para convertirse finalmente en el primer presidente negro de la historia de Estados Unidos. 

Más tarde se reconciliaron, y Clinton se convirtió en jefa de la diplomacia estadounidense, cargo que ejerció durante la primera gestión de cuatro años de Obama.

Ahora Clinton intenta hacer historia y transformarse en la primera mujer en llegar a la casa Blanca.

En factor clave
En el camino frente a Clinton  está Donald Trump, un magnate sin pelos en la lengua que se alzó de hecho con la candidatura presidencial del Partido Republicano, en el que genera resistencias.

Obama goza de un nivel de popularidad envidiable que puede llegar a ser un factor decisivo a medida que se aproximan las elecciones del 8 de noviembre. La campaña de Clinton anunció ayer que un primer acto conjunto con Obama tendrá lugar en Green Bay, Wisconsin, el miércoles 15 de junio.

Tras su reunión con Obama, Sanders no aludió a bajarse de la carrera presidencial, pero dijo que se reunirá pronto con Clinton para unir al Partido Demócrata y derrotar a Trump. 

Aunque Sanders ha dado indicios de que entiende que sus aspiraciones presidenciales están llegando a su fin -e incluso ya está despidiendo a casi la mitad de su equipo- ha prometido seguir luchando, causando preocupación entre los líderes del partido ansiosos de que concluya la contienda primaria. Todavía viéndose como candidato, Sanders planeaba realizar un mitin hoy en Washington, donde habrá elecciones el 14 de junio, las últimas del proceso primario demócrata.

Obama ha instado a Sanders a reconocer a Clinton como la triunfadora, pero destaca la contribución del senador por Vermont, que atrajo a grandes masas de jóvenes a filas demócratas.

La reunión de ayer fue una manifestación de respeto del jefe de Estado hacia Sanders. 

“Pienso que Bernie Sanders aportó un gran caudal de energía y nuevas ideas”, que han contribuido a hacer de Hillary Clinton “una mejor candidata”, dijo Obama.