Los parlamentarios del Mercosur del Frente para la Victoria (FpV) y de UNA manifestaron su intención de que hoy el exsecretario de Obras Públicas detenido por supuesto enriquecimiento ilícito, José López, deje de formar parte del órgano parlamentario regional como consecuencia de su expulsión, y no de la renuncia que presentó en el marco del tratamiento legislativo.

Jorge Taiana (FpV), presidente del Parlasur -un órgano legislativo que no emite leyes sino meras recomendaciones-, manifestó la "frustración" experimentada por el bloque al no haber podido expulsarlo el 21 de junio cuando desde Cambiemos votaron en contra, considerando que no se respetaba el reglamento interno y que debía efectuarse previamente una investigación del caso, proceso que se encuentra en marcha.

Hoy, en el nuevo encuentro del cuerpo que tendrá lugar en Montevideo -desde las 9 en comisión, y desde las 13 en sesión plenaria- se continuará con el tratamiento del tema luego de que el 29 de julio último el detenido en el penal de Ezeiza presentó su renuncia a través de un escrito.

El diputado del Parlasur Alberto Asseff -partido Unir, integrante del Frente Renovador- anticipó que en la sesión de hoy en Montevideo se tratará el dictamen de la Comisión de Asuntos Internos que recomienda la expulsión de López por "falta de decoro".

"López renunció al Parlasur cuando se le notificó el expediente que se formó para proceder a su exclusión por falta de decoro. Esa renuncia es una confesión de culpabilidad, pero muchos parlamentarios, entre los que me incluyo, votaremos por la expulsión y no por aceptar la renuncia. Es ineludible que desde el Parlasur demos un mensaje aleccionador tal como reclama la sociedad argentina y no dudo que también todo el Mercosur", dijo Asseff.

Reglamento

En este sentido, el parlamentario Daniel Filmus dijo que para su bancada "el reglamento establece que se lo podía expulsar, además hubiera sido un mensaje importante para la sociedad. No obstante, esperamos que en la reunión de mañana podamos expulsarlo".

En el mismo sentido se pronunció la parlamentaria Fernanda Gil Lozano (UNA), quien oficializó el pedido en una carta enviada a Taiana. La parlamentaria se pronunció por "no aceptar la renuncia de López y avanzar con las sanciones disciplinarias".

Falta de decoro

En la misiva -enviada el martes pasado-, Lozano argumenta con el "artículo 27 del reglamento del congreso regional, que establece en su inciso primero que no será aceptada la renuncia de ningún parlamentario que se encuentre sometido a procedimiento disciplinario o por actos de falta de decoro al parlamento".

A continuación cita que "se establece el modo en que el cuerpo debe proceder, notificando sin demora a la comisión competente, que la incluirá en el orden del día de su primera reunión siguiente a la recepción de esta notificación, entre otras aclaraciones". Siguiendo esa normativa, la diputada destaca que "no puede aceptarse la dimisión" de López considerando que "el cuerpo no alcanzó las mayorías necesarias para su expulsión por falta de decoro, dado que un grupo de parlamentarios solicitó en su oportunidad el pase a Comisión, trámite que aún está pendiente".

Ayer, José López ante la Justicia que los millones de dólares que se encontraban en los bolsos con los que fue detenido en un convento en General Rodríguez "pertenecían a la política".

"Ese dinero no me pertenecía, ese dinero pertenecía a la política. Y yo, cuando tenga la fortaleza física, psicológica y espiritual necesaria, voy a dar todos los detalles con relación a ese dinero, y sobre este tema no voy a contestar en este momento ninguna otra pregunta", señaló López ante el juez federal Daniel Rafecas, que lo investiga por enriquecimiento ilícito.

En el despacho del magistrado, el exfuncionario sostuvo que los bolsos con dinero se encontraban originalmente "tapados, como en un falso piso", en un lugar "inaccesible, que nadie sabía" en su habitación en la casa de Dique Luján, al que accedía con una escalera, atravesando una ventana hacia donde está el tanque de agua.

En la ampliación de su indagatoria, López relató lo sucedido aquella noche del 14 de junio y los días previos a su detención: sostuvo que tuvo algún "brote psicótico" con "delirios persecutorios", que lo llevaron a escapar hacia el convento para dejar el dinero.

"Cuando veo las imágenes del convento, digo que no reconozco a esa persona, si bien era yo, ya que en ese momento estaba fuera de sí. Me dicen que fue psicosis, brote psicótico, paranoia, delirio persecutorio, no lo sé, lo que sí sé es que con mi profunda fe religiosa, por el profundo respeto que siento por Madre Alba, realmente no puedo entender lo que pasó", señaló.

En su descargo, el exfuncionario sostuvo además que "más que profugarse, iba al encuentro para entregarse", ya que no llevaba consigo pasaporte, ni ningún efecto personal, e insistió en que ni su esposa ni las monjas sabían del contenido de los bolsos.

"Las hermanas no tenían ningún conocimiento del contenido de los bolsos, yo nunca se los informé. Mi señora tampoco sabía qué había hecho esa noche porque yo no atendí en ningún momento el teléfono. Desde ya que ella no tenía ninguna idea de la existencia de los bolsos con dinero en el lugar inaccesible y oculto que yo tenía en la casa", sostuvo.

López señaló además que su trayecto en auto aquella madrugada tenía "la sensación de ir en un sueño, en una nube" y que cuando salió de su casa "no tenía rumbo ni destino fijo", pero que "veía cada 200 metros un patrullero y algún auto que se acercaba despacio y luego salía picando" con el supuesto objetivo de "alterarlo".

"Yo iba como perdido, no veía los letreros de la autopista", sostuvo López, aunque aclaró que no había tomado ni alcohol ni drogas y que llevaba el arma para "defenderse" de lo que "esperaba enfrentar", sin saber "qué o quiénes serían".

López sostuvo que una vez en el convento tocó varias veces timbre y, como no atendía nadie, arrojó los bolsos y la carabina del otro lado del portón y saltó, pero confirmó que previo a ello un supuesto vecino -que daría luego aviso al 911- lo llamó y el respondió: "Ya vuelvo".

"No sé si era vecino, servicios de inteligencia. Estaba justo frente al portón de entrada, del otro lado de la calle. Cuando llego a la puerta de la vivienda, veo por la calle de enfrente una camioneta tipo Ranger con caja descubierta con cuatro o seis personas, una de ellas como haciendo el gesto de que estaba filmando y una de ellas dijo "¡ahí está, ahí está!", apuntó.

Respecto a su encuentro con la Madre Alba, López dijo que no recuerda haberle hablado, pero "sí haberla escuchado" y señaló además que había visitado el convento "siete u ocho veces en los doce años" que estuvo en Buenos Aires.

La advertencia del diputado y su "delirio persecutorio"

López sostuvo que a mediados de junio, en la sesión de parlamentarios del Mercosur, bloque al que finalmente renunció, su colega correntino Alejandro Karlén (FPV) le advirtió que ambos estaban siendo investigados por el servicio de inteligencia, lo cual le "preocupó", y que en los días posteriores notó "incoherencias" en su computadora y en su teléfono celular: sostuvo que en un grupo de Whatsapp le apareció el mensaje: "Éste es el día. Con Google no vas a poder".

El exfuncionario dijo que se quedó "más preocupado de lo que ya estaba" y que cuando salió de su casa ese lunes al mediodía, previo a su detención, había unas 50 personas realizando trabajos "a lo largo de toda la cuadra, algo que no era habitual" y que a la hora cuando regresó "ya no había nadie".

De regreso a sus oficinas de la Capital Federal, López dijo que se sentía "muy ansioso y angustiado" y que al llegar al estacionamiento cargando un maletín con su notebook una pareja que venía detrás suyo señala: "¿Qué llevará en ese maletín? ¿Droga ¿Dólares? Nosotros queremos ese maletín".

López sostuvo que esa noche, cuando llegó a su casa del Dique Luján encendió el televisor y escuchó "voces burlonas, incoherencias, cosas sin sentido", mientras que su esposa le decía que tenía que "descansar" porque "estaba delirando", por lo que le pidió que lo comunicada con el convento de la Madre Alba en General Rodríguez, ya que era "el único lugar donde hallaba paz".

"Ella me comunicó con Alba. Alba me decía que me quedara tranquilo, pero yo seguía escuchando voces. Subí muy nervioso al dormitorio, fui con la clara intención de buscar la pistola Glock que tenía allí pero no la hallé, entonces me acordé de la carabina. Cuando bajé a la planta baja con la carabina mi señora se asustó, levantó la cartera y salió, se fue en el auto y yo me quedé solo", relató y dijo que en ese momento "tenía intenciones" de matarse.

El exsecretario dijo que a partir de ese momento le cuesta recordar, ya que se le mezclan "voces e imágenes", pero sostuvo: "En ese instante que estaba con la carabina en la mano escuchó una voz masculina que decía ´te va a pasar lo mismo que al Lauchón", en referencia al agente de contrainteligencia de la SIDE muerto en un operativo policial.

"Yo solté la carabina y le dije: ´No soy Nisman, no me voy a suicidar´. Subí al dormitorio de planta alta y vi como humo o gas o neblina dentro del dormitorio, una cosa borrosa, me asusté, pensé que me querían dormir. Bajé al patio y vi al lado mío manchas de sangre en el césped. Me puse muy nervioso, seguía escuchando voces, música, cosas incoherentes. Me daba la sensación de que siempre había alguien atrás mío", señaló.

Consultado sobre Andrés Galera y Eduardo Gutiérrez, señalados como sus supuestos testaferros, López subrayó: "Niego rotundamente que esa vivienda (la de Dique Luján) forme parte de mi patrimonio y niego rotundamente que Galera o Gutiérrez fueran testaferros míos".

"Por último, quiero decir que ni yo, ni mi señora, ni mi familia, nos enriquecimos con la función pública. Tenemos las mismas propiedades que en 2003. Exactamente los mismos bienes que en 2003. Nuestras cuentas están todas a la vista en bancos argentinos y eso se puede corroborar", completó.