La Cámara de Diputados empezará esta semana a cumplir una de las principales promesas de campaña del presidente Mauricio Macri: reemplazar el sistema de votación tradicional de papel por la boleta electrónica, en todo el país. 

La reforma electoral, una ley extensa que además de la boleta electrónica introduce cambios en el régimen de Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y le otorga mayor poder a la Justicia en el proceso electoral, se tratará el miércoles a partir de las 11 en sesión.

Para su aprobación se requiere mayoría calificada: esto significa que se deben contar al menos 130 de los 257 votos posibles, tanto para la aprobación en general como la de cada uno de los artículos.

Los números para la aprobación están garantizados debido a un nuevo acuerdo entre el interbloque Cambiemos y sus aliados de la oposición, el massismo y el bloque del exkirchnerista Diego Bossio (suman 140 votos). Pero en la discusión del articulado puede haber novedades, porque en el dictamen de mayoría hay firmas en disidencia. Sin embargo, diputados de los tres espacios descartan que sean modificaciones sustanciales.

Además, voceros de Cambiemos ya hicieron saber que en el Senado hay conversaciones con los principales referentes para que la iniciativa sea convalidada y no se le apliquen modificaciones, de modo que pueda ser promulgada a la mayor brevedad para llegar a su puesta en vigor en todo el país tanto en las PASO como en las generales de 2017.

La reforma electoral propuesta por la Casa Rosada, en cambio, sí es rechazada de plano por la primera minoría de la Cámara baja, el bloque Frente para la Victoria-PJ, que tiene 70 de los 257 diputados: desconfían del circuito electrónico del voto, arguyen que es hackeable y, aunque admiten que es necesaria una reforma, se inclinan por seguir usando el papel.

En diálogo con Los Andes, el diputado kirchnerista Guillermo Carmona afirmó que “se ha instalado la idea de que con este sistema los datos de las elecciones van a estar rápido” y que en su bloque entienden que, en realidad, “se está sacrificando la fiabilidad del voto”.

“En la votación con papel, en todas las instancias, tenés la posibilidad de que cualquier ciudadano pueda verificar la fiabilidad del sistema, en la distribución de las boletas, en la presencia de boletas en el cuarto oscuro, recuento de votos y en el recuento ante la Justicia Electoral. Con el sistema informático ese acceso no es posible porque se requiere experiencia y aptitudes que no tienen todos los ciudadanos”, resaltó el mendocino.

Sostuvo también que “se podría comprometer el carácter secreto del voto, porque el chip de la boleta, al ser emisor de radio frecuencia, permite la lectura a distancia”, y subrayó que el voto electrónico “está en retroceso en el mundo y son muy pocos países que lo utilizan”.

En la vereda de enfrente, el diputado massista Juan Brügge sostuvo que cada máquina de votación electrónica “es independiente” y no está en red, de modo que es menos riesgoso su hackeo que aquel que pudieran sufrir, por ejemplo, las transacciones por home banking. Además, resaltó que el uso de celulares en el cuarto oscuro estará expresamente prohibido.

“La máquina que vamos a usar no almacena datos. Imprime una boleta. El ciudadano ve en la boleta lo que vio en pantalla. Esa boleta tiene un chip que servirá para la lectura electrónica de la votación. Pero el día de la elección se cuentan manualmente las boletas impresas por la máquina y se computa el escrutinio manual, primero. Una vez verificado el manual se pasa al escrutinio electrónico. Si coinciden, se imprime el acta de escrutinio, se firma y se manda. Si no coinciden, prevalece lo que está impreso”, explicó.

El cordobés señaló que a diferencia de Brasil, donde todo el proceso es electrónico sin respaldo de papel, en este caso queda la boleta impresa y las auditorías sobre el proceso electrónico se realizan de manera “previa, concomitante y posterior”, además de que la Cámara Nacional Electoral ahora tendrá a cargo el escrutinio provisorio y la elección del sistema, tras lo cual el Poder Ejecutivo se encargará del proceso licitatorio.

“No puede haber voto cadena ni desviación de voto, porque la máquina no almacena nada. El chip puede leer una sola tarjeta y el escrutinio en mesa es enfrente de los fiscales”, dijo también Brügge, uno de los artífices del consenso entre Cambiemos, el massismo y el Bloque Justicialista, que integran tres diputados que responden al gobernador Juan Manuel Urtubey, de Salta, donde se utiliza la boleta electrónica.

Puntos principales

Sistema de votación. Se dejará de usar el sistema actual, de votos de papel, para utilizar la boleta electrónica.

Primarias. Dejarán de ser abiertas. El elector solamente podrá votar a los candidatos de un solo partido o frente electoral. 

Fórmula presidencial. En las PASO ya no se presentarán presidente y vice juntos como precandidatos, sino únicamente el presidente.

Esto permitirá que el derrotado en la interna pueda ser elegido por el ganador como su compañero de fórmula. 

Paridad de género. En las listas de candidatos a diputados y senadores nacionales las mujeres deben ocupar un 50% de las postulaciones.

Prohibición de candidaturas múltiples. Los candidatos deben hacerlo para una sola categoría  y no se admitirá la participación  simultánea para cargos nacional y provincial o municipal.

DyN