Dos frentes de negociación paralelos arrojaron un resultado que entusiasma a la oposición parlamentaria y los movimientos sociales: Cambiemos fijó un cronograma de tratamiento para la reforma del impuesto a las Ganancias y el Poder Ejecutivo dio el visto bueno a un nuevo proyecto de Emergencia Social.

Tras arduas negociaciones, que iniciaron este martes con chats cruzados y continuaron este miércoles en medio de la sesión en la Cámara de Diputados, el Frente Renovador aceptó declinar la convocatoria a sesión especial para tratar ambas iniciativas, que a partir del acuerdo serían ley este año.

“No queríamos terminar el año parlamentario con un chiquero alrededor del reglamento”, reconoció el jefe del interbloque Cambiemos, Mario Negri, al cabo de una intempestiva cumbre en el Salón Blanco, donde acudieron los ministros de Hacienda, Alfonso Prat Gay, y de Interior, Rogelio Frigerio, además de representantes de todos los bloques.

El acuerdo verbal alcanzado en torno a Ganancias establece que la discusión comenzará el martes próximo en la Comisión de Presupuesto, donde se celebrará una reunión informativa, para firmar dictamen el jueves 1 de diciembre y llevarlo al recinto el martes 6.

Con este nuevo calendario, desde Cambiemos aseguran que hay aval del Senado para sancionar la ley antes de fin de año y apaciguar el clima social, en el marco de la convocatoria a extraordinarias que este miércoles oficializó el Poder Ejecutivo.

Lo cierto es que nada se habló todavía del contenido del proyecto que envió el Poder Ejecutivo, que tiene fuertes diferencias con el que impulsa el diputado Sergio Massa, sumado a más de un centenar de iniciativas de todo el arco político.

Por el mismo carril, Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) consiguieron una respuesta satisfactoria del Gobierno para avanzar con un nuevo proyecto de Emergencia Social, con Diputados como Cámara de origen.

Referentes sociales se reunieron con los ministros de Trabajo, Jorge Triaca, y de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y lograron firmar un acta de compromiso de siete puntos que puso fin a las negociaciones.

La Emergencia Social no durará un año, sino tres, y se autorizará al Poder Ejecutivo a reasignar partidas por 25 mil millones de pesos durante la vigencia de la ley.

Entre los puntos consensuados figura la actualización de los montos de los programas “Argentina Trabaja”, “Ellas hacen” y “Trabajo Autogestionado” a la suma de 4.000 pesos, además de un pago adicional de 2030 pesos a los beneficiarios de estos planes.

También se acordó un aumento del 40% de las partidas para comedores comunitarios, y del 63% para merenderos, y la distribución de un millón de canastas navideñas entre los sectores vulnerables en todo el país.

El proyecto que será redactado en las próximas horas no contemplará, en cambio, el aumento del 15% para beneficiarios de las asignaciones por Hijo y por Embarazo, pero sí incluirá la creación del Salario Social Complementario que será fijado por un nuevo Consejo de la Economía Popular.

El texto acordado obtendría dictamen el jueves 1 junto con la reforma de Ganancias, para ser tratado en el recinto también a la semana siguiente.

De la cumbre de este miércoles en el Salón Blanco participaron, además de Prat Gay, Frigerio, Negri y Massa, el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; el jefe del bloque Pro, Nicolás Massot; los diputados Graciela Camaño, Felipe Solá, Marco Lavagna (Frente Renovador), Héctor Recalde y Axel Kicillof (Frente para la Victoria).

También estuvieron Fernando Sánchez (Coalición Cívica), Oscar Romero (Justicialista), Leonardo Grosso, Lucila De Ponto, Remo Carlotto (Movimiento Evita), Alicia Ciciliani (Partido Socialista), Victoria Donda y Federico Masso (Libres del Sur).