El bloque del Frente para la Victoria en el Senado deslizó que no está en condiciones, al menos en lo que queda del corriente año parlamentario, de avanzar con los pliegos del nuevo directorio del Banco Central.

La jugada para dejar "en comisión" a la designación de Federico Sturzenegger como titular de la entidad gatillará una especie de "revival" de Mercedes Marcó del Pont, es decir, la situación de fragilidad institucional que vivió la expresidenta del BCRA durante años kirchneristas.

A inicios de 2010, Marcó del Pont reemplazó a Martín Redrado y completó su mandato en el BCRA. Para esa ocasión, el FpV sí recibió la orden expresa de la exjefa de Estado. De hecho, tuvo una dura batalla en el recinto para conseguir las voluntades, pero una sugestiva abstención del riojano Carlos Menem le abrió la puerta a la confirmación del pliego, que pasó por un voto.

Desde fines de septiembre de 2010, Marcó del Pont fue ratificada por un período más -de seis años-, pero naufragó en mares de debilidad por la inexplicable decisión de Cristina de Kirchner de no pedirle al Senado -al bloque del FpV, con votos de sobra- que avalara su pliego en el recinto, que necesitaba mayoría simple.

En el último trimestre de 2013, la exprimera mandataria echó a Marcó del Pont y la reemplazó con Juan Carlos Fábrega. Poco menos de un año más tarde, apareció en escena Alejandro Vanoli. Para los últimos dos, Cristina de Kirchner apuró el aval a sus pliegos en el Senado.

Operadores políticos del FpV aseguraron a este diario que la decisión final sobre el directorio del BCRA no está tomada, pero el razonamiento es el siguiente: por ahora no van a rechazar los pliegos, pero tampoco apurarán designaciones ajenas ya que éstas pueden seguir, como en el caso de Marcó del Pont, en comisión.

El FpV del Senado, ahora en rol opositor, piensa que si el oficialismo está tan apurado, debería tener los votos necesarios para llevar las designaciones al recinto y aprobarlas. Así lo pinceló un legislador K al término de la audiencia pública que realizó la comisión de Acuerdos del Senado el 16 de noviembre pasado.

Durante ese cónclave, Sturzenegger y el buró del BCRA que nombró Mauricio Macri defendieron el plan monetario de Cambiemos. "Uno tiene que bajar la inflación a un punto en que la gente deje de pensar en la inflación", destacó el presidente de la entidad ese día, y dejó en claro que ese tema fue "abordado por un camino que nunca ha probado Argentina".

El bloque que comanda el rionegrino Miguel Pichetto sabe que los funcionarios son idóneos para los respectivos cargos, pero avalar todos los pliegos hasta 2022 por ahora les suena muy fuerte para los pocos votos que tiene el Gobierno en esa Cámara. En tanto, el sector ultra-K está enojado por las decisiones de toma de deuda (en realidad, deberían pedir explicaciones al Ministerio de Hacienda, no a Sturzenegger). Eso sí: los senadores no se quejaron sobre los permisos para que provincias colocaran bonos en el exterior, o por el aumento en los distritos de los descontrolados gastos públicos locales para saciar reclamos estatales o piqueteros.