Tiene 12 años, es arquero de fútbol y  esta mañana se levantó sin imaginar que iba a atajar el penal más importante de su vida. Le detuvo un puntinazo nada más y nada menos que al presidente de la Nación, Mauricio Macri.

Esta es la historia del guardameta de la categoría 2004 del club San Pablo, de El Algarrobal, en Las Heras. Institución social y deportiva que tiene a la cabeza al ex jugador profesional de San Martín de MendozaCarlos Azcurra, quien se retiró de las canchas tras recibir un disparo por un policía en medio de un partido en 2005.

Sin guantes en sus manos pero con una concentración inquebrantable se paró debajo de los tres palos, no se 'comió' el amague de Macri y salvó el honor de su querido club y el de su padre, quien es el entrenador de arqueros del San Pablo.

Charla presidencial y promesa

El mandatario nacional recorrió el centro social junto a Cornejo y funcionarios, habló con los chicos,entrenadores y vecinos de El Algarrobal.

Sin embargo, una conversación se destacó por sobre las demás. Cristián, un chico del club, se acerco a saludar a Macri cuando el presidente ya estaba subido a la trafic.

En un fuerte apretón de manos, el Jefe de Estado le dijo al oído: 

“Para seguir jugando a la pelota te tiene que ir bien en la escuela, ¿me lo prometés?”.

El nene le respondió con una gran sonrisa.

Una breve conversación que seguramente perdurará en la memoria del pequeño futbolista. 

Fuente: corresponsalìa Claudio Gutièrrez