Josep María Bartomeu, presidente del Barcelona, sigue dándole vueltas a la renovación de Lionel Messi, estrella del equipo culé, que acaba contrato con el Barcelona el 30 de junio de 2018. Con margen para poder cerrar un acuerdo hasta entonces, siempre con el riesgo que el jugador pueda sentarse con quien quiera de manera libre a partir del 1 de enero del próximo año, el mandamás del club azulgrana sabe que las dos partes deben encontrar un punto de encuentro, aunque las posturas, a día de hoy, parecen bastante distanciadas, aunque tal y como explican "nadie es pesimista".

Messi pide mucho dinero al Barça. Pero mucho es mucho. Superaría los 35 millones netos de largo. Pero el jugador conoce el límite que tiene el Barça, que la semana pasada anunció la renovación de Ivan Rakitic, que firmó durante el pasado verano las de Luis Suárez, Busquets y Neymar, y que trabaja también las de Marc André ter Stegen y Andrés Iniesta.

El club, por su parte, en este caso Bartomeu, tiene la parcela económica metida en su cabeza y valora seriamente no moverse más allá que hasta donde pueda para lograr que Messi quede saciado. De esta manera y aprovechando que hay piezas en la plantilla que no acaban de funcionar, el mandamás de la entidad valora vender alguno de los futbolistas (el que encaja es Arda Turan) de la actual plantilla para poder ganar músculo económico y cerrar de una vez la continuidad de Messi (29 años) en el Camp Nou.

Por mucho que algunos le quieran dar celeridad, tal y como informó AS hace unas semanas, las cosas avanzan poco a poco y en los despachos del área de fútbol entienden que quedan muchos capítulos por cerrar. Jorge Messi, padre del jugador, sigue en Argentina, donde llegó hace un par de semanas después de pasar una pequeña temporada en Barcelona. Con el agente del futbolista tan lejos, los contactos de Bartomeu tienen dos canales: el directo vía telefónica y otro en el que hay un intermediario que satisface a las dos partes, que tiene la absoluta confianza del entorno del jugador y del club y que trata de asistir a las necesidades que presenta la negociación.
Fuente:Moisés  Llorens