Paolo Rocca, el líder de una de las mayores siderúrgicas de Latinoamérica calificó de "preocupante" la caída de la actividad que se registra en la Argentina y se sumó d eesta manera a la lista de empresarios que manifiestan públicamente su intranquilidad por la marcha de la economía.

"Por el lado de la demanda, tanto el consumo privado y la inversión como las exportaciones y las importaciones vienen cayendo trimestre a trimestre", aseguró Rocca. "Distintos indicadores de la industria y de la construcción muestran este proceso que se se inició a fines de 2013", apuntó.

El titular del principal grupo industrial argentino precisó que "la caída en las ventas de varios sectores industriales clientes (automotriz, línea blanca, entre otras) está impactando en el nivel de operaciones de Ternium Siderar -la empresa más vinculada al mercado doméstico- y en las actividades vinculadas al área de la construcción".

El empresario, quien ha sido objeto de amenazas en más de una oportunidad por parte del Gobierno (Axel Kicillof llegó a amenazar con "bajar el precio de la chapa para fundir al señor Paolo Rocca") señaló que Techint Ingeniería y Construcción está afectada desde el año pasado "por la postergación o suspensión de algunos grandes proyectos de infraestructura privados derivadas de las dificultades económicas y cambiarias de la Argentina".

Para modificar este escenario, Rocca consideró -en declaraciones al diario Clarín- que es necesario "recrear condiciones para otorgar mayores niveles de certidumbre a la economía local", e indicó que eso se lograría "corrigiendo desequilibrios macroeconómicos y aliviando la presión tributaria".