DEPORTES
30 de septiembre de 2017
El gran desafìo de Los Pumas ganarle All Blacks
Ganarle a Nueva Zelanda es una cuenta pendiente del rugby argentino, que supo poner en aprietos a los mejores del mundo
Ganarle a los extraordinarios All Blacks, ese objetivo que parece una utopía para los Pumas a medida de que pasa el tiempo. Tanto en la época ciento por ciento amateur como en la profesional. Aunque hubo algunos partidos en los que la hazaña estuvo al alcande de la mano. Fueron tres casos concretos, todos en partidos disputados en la Argentina y recordados por tres protagonistas del seleccionado: Fabián Turnes (1985), Federico Méndez (2001) y Federico Todeschini (2006).
Argentina 21-Nueva Zelanda 21
2 de noviembre de 1985, estadio de Ferrocarril Oeste
Los Pumas venían de hacer un gran partido una semana antes frente al mismo rival y llegaban con expectativas de ganar. El juego no fue tan bueno, pero la magia de porta (cuatro penales y tres drops) mantuvo a los argentinos a tiro. Sobre el final, tuvieron un scrum 5 para ganar, pero un knock-on del octavo Ernesto Ure terminó con el encuentro. Es el único empate en la historia. Lo rememora Fabián Turnes, por entonces un promisorio centro de 20 años.
"Fue un buen año para el rugby argentino. En junio se le había ganado a Francia un partido y en el otro se perdió ajustadamente. Era un equipo con un mix de inconsciencia de juventud y la frescura de los backs comandada por Hugo Porta y con un pack aguerrido y experimentado. Lo hacía desarrollar un juego atípico al rugby argentino de esa época de garra, tackle y scrum".
"Papuchi Guastella y Pochola Silva nos convencieron de que se podía. El partido nos costó, nos hicieron cuatro tries, pero contamos con un día inspirado, como tantos, de Hugo, y lo podríamos haber ganado al final. Era otro rugby, pero desde que tengo uso de razón los All Blacks son el equipo. No me imaginaba que ese partido iba a quedar en la historia".
Argentina 20-Nueva Zelanda 24
1° de diciembre de 2001, Estadio Monumental
Otra gran oportunidad se escapó en 2001 en un Estadio Monumental repleto con casi 60.000 espectadores. Los Pumas ganaban 20-17 con el tiempo cumplido, Felipe Contepomi falló un penal y luego un despeje suyo quedó adentro y, de contra, Scott Robertson (actual entrenador de los Crusaders campeones del Súper Rugby) apoyó el try que los privó del triunfo. Lo recuerda Federico Méndez, hooker de aquel equipo, que tiene en su haber un triunfo ante los All Balcks en un Test Match jugando para Resto del Mundo en 1992.
"Fue una de las épocas donde más consolidado estaba el equipo. Venía de performances sólidas, tanto en Europa como en la Argentina. Me acuerdo del marco imponente con un estadio de River lleno, explotado. Debe haber sido el partido en la Argentina con mayor asistencia de público en las historia. Se nos escapó al final. Me acuerdo de que en la última jugada termino persiguiendo a un wing sin chances de agarrarlo".
"Nueva Zelanda venía con un equipo en formación, tenían un conjunto un poco más accesible que de costumbre. El planteo había sido no sólo contenerlos, sino salir a jugar. Salió bastante bien. Los dominamos con el maul y con el poderío de los forwards y a partir de ahí pudimos abrir un poco la pelota y les marcamos dos tries [de Lisandro Arbizu]."
Argentina 19-Nueva Zelanda 25
24 de junio de 2006, Estadio José Amalfitani
El último equipo que estuvo cerca de ganar fue el que un año más tarde conseguiría la medalla de bronce en Francia 2007. Los Pumas perdían por seis y con el tiempo cumplido tuvieron un line-out a favor en la yarda 5 rival. Durante dos minutos insistieron con el maul, el pick-and-go, por afuera, pero luego de 10 fases perdieron la pelota. Lo recuerda el apertura Federico Todeschini, autor de 14 puntos esa noche.
"Sabíamos que estábamos para hacer un buen partido, teníamos muchas expectativas de ganar. Fue un partido muy parejo, trabado, de mucha fricción. Lloviznaba y la pelota estaba difícil de maniobrar. Los teníamos controlados en formaciones fijas y en los duelos uno contra uno. Ellos nos hicieron dos tries con jugadas afortunadas [Martín Durand apoyó el único try argentino]. Son esos días que estás bien, pero tuvieron esa cuota de suerte. La gran virtud que tienen los All Blacks es su fortaleza mental, lo que los diferencia del resto. Tienen la capacidad de jugar al 80% de su potencial el 90% del tiempo."
"En la última jugada tuvimos un line en cinco yardas. El maul era una fortaleza nuestra, pero nos desgranaron rápido, insistimos con el pick-and-go, pero estaban bien parados. Tenían un resto de energía superior al nuestro. Tiramos la pelota a la punta con una espalda que solíamos hacer, parecía que sobrábamos, pero a Felipe lo obligan a pisar para adentro con una marca adelantada. Con cancha seca capaz salía el pase más rápido. Después perdimos la posesión. Darnos cuenta de que perdimos por 6 puntos, habiéndoles jugado de igual a igual, fue una tristeza grande al principio, pero también satisfacción muy grande a un año del Mundial".
COMPARTIR:
Comentarios
Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!