Rafael Nadal llegó a la Copa de Maestros de Londres "con el aliento al límite", según escribió el propio Toni Nadal , tío y entrenador del español, en su columna del diario El País. Pero más allá del lógico desgaste atlético por los numerosos kilómetros recorridos en una temporada exigente -y muy exitosa-, el número 1 del ranking llegó al O2 Arena británico con la rodilla derecha maltrecha. Más precisamente, con agudos dolores por la carga de estrés que sufre en el tendón rotuliano. Y así se mostró en su presentación en el Grupo Pete Sampras: jugando en una pierna, perdió frente al belga David Goffin (8º del mundo) por 7-6 (7-5), 6-7 (4-7) y 6-4, en dos horas y 37 minutos. La inmediata sensación que dejó tras el match fue que no se presentaría en su próximo desafío y así lo confirmó poco después. Llegó pronto a la rueda de prensa y anunció que se retiraba del torneo, que le ponía punto final a su temporada. "Fue una decisión que tomé durante el partido. Ganando o perdiendo, me hubiera ido", dijo Nadal (su lugar será ocupado por su compatriota Pablo Carreño Busta , primer suplente en Londres).

"Si me retiré en París Bercy no fue por ninguna precaución, fue porque no podía seguir. Evidentemente, en pocos días es difícil arreglarlo", había explicado el ganador de 16 trofeos de Grand Slam antes de empezar la competencia en Londres. Luego de no actuar en el último Masters 1000 del año, se puso en manos de su médico de confianza, Ángel Ruiz Cotorro, con el deseo de reparar la rodilla todo lo que pudiera. Sin embargo, por lo visto ante Goffin, poco pudo hacer. Nadal sufrió todo el partido y cada vez que el belga lo exigió hacia los laterales, el mallorquín no llegó o, si lo hizo, lo consiguió con demasiado sacrificio y haciendo pasos cortitos, como para no cargar todavía más la zona dolorida.

Las limitaciones en los movimientos perturbaron el resto del juego de Nadal. Y si en algún momento logró luchar fue, simplemente, por el coraje con el que construyó su leyenda. Errático de drive y de revés, e impreciso con el saque (Goffin le rompió el servicio cinco veces), casi nunca pudo dominar el juego frente a un adversario que tuvo dudas y logró ganar recién en el quinto match point.

Al retirarse, Nadal seguirá sin ganar el único trofeo grande que le falta: el Masters (perdió las finales de 2010 y 2013 frente al suizo Roger Federer y al serbio Novak Djokovic , respectivamente). "Tuve un gran año, no voy a llorar", concluyó Nadal, que ganó seis títulos en la temporada (incluidos Roland Garros y el Abierto de los Estados Unidos ).

Carreño Busta, que hasta último momento tuvo chances de entrar directo en el Masters, pero se lo impidió el estadounidense Jack Sock ganando París Bercy, tomará el lugar de Nadal y este miércoles jugará ante el austríaco Dominic Thiem, batido por Grigor Dimitrov (6-3, 5-7 y 7-5).

Este martes se jugará la segunda jornada del Grupo Boris Becker. Desde las 11 de la Argentina, Sock ante el croata Marin Cilic. Y a las 17, Federer contra el alemán Alexander Zverev (ambos triunfaron en sus presentaciones).