Hugo Moyano es un dirigente peronista de toda la vida, pero durante este verano, acorralado por varias causas judiciales, el líder de Camioneros se mostró activo en actos del justicialismo. Tanto que el viernes pasado viajó hasta San Luis para participar de un encuentro de la militancia del PJ, convocado por el gobernador Alberto Rodríguez Saá.

Iba a ser una reunión “abierta” que aglutinara a todos los sectores del peronismo nacional, según la convocatoria que había realizado el mandatario de San Luis, pero finalmente se convirtió en una cumbre del kirchnerismo. Salvo la expresidenta Cristina Fernández, estuvieron todos los referentes de su espacio político.

Moyano fue uno de los oradores en la localidad de La Pedrera. Aseguró que para derrotar al macrismo y al liberalismo “hace falta de la unidad de todos los peronistas”.

No estaba anunciado, pero el sábado pasado, Moyano apareció luego con sus hijos Pablo y Facundo Moyano en un congreso provincial del poderoso PJ bonaerense, que se realizó en el partido de Hurlingham.
En esa oportunidad, no habló, pero su presencia fue interpretada como una señal del sindicalismo para participar activamente en la interna del PJ nacional.

Luego de la convocatoria multitudinaria de una manifestación en contra del Gobierno nacional, el 21 de febrero pasado, Moyano se convirtió en el más ácido rival del presidente Mauricio Macri.

El extitular de la CGT nacional denunció que el macrismo lo quiere “ver preso” y señaló una supuesta operación política urdida desde la Casa Rosada para “privarlo” de su libertad.

Causas

Más allá de las denuncias que hizo, hay tres causas que preocupan al líder de los Camioneros.

Una es por presunto lavado de dinero y administración pública (que se tramita en Córdoba), otra por posibles desvíos de fondos de la obra social de los Camioneros y la que más nervioso lo pone es por supuesta asociación ilícita, por fraude al club Independiente.

Los nervios del camionero tienen fundamentos: en la causa de Independiente, varios de los procesados están detenidos. En fuentes judiciales no descartan que Moyano y su hijo Pablo (vice del club), puedan transitar el mismo camino, si son citados a indagatoria.

En este contexto de tensión con la Justicia, Moyano decidió regresar a la militancia en el peronismo, cerca del kirchnerismo.

El también presidente de Independiente admitió días atrás que tomaría un café con Cristina Fernández, pero ese encuentro aún no tiene fecha.

Moyano fue un aliado del kirch-nerismo durante la gestión de Néstor Kirchner, pero se distanció de ese espacio cuando el expresidente murió en octubre de 2010. Es más, en el último mandato de Cristina, fue muy crítico de los “K” y se mostraba cerca del macrismo.

Si bien nunca hubo un pronunciamiento público en favor de Macri, durante la campaña presidencial en 2015, Moyano dio señales de que estaba cerca. Pero ese acercamiento no duró mucho.

Ahora, Moyano ve al Presidente como su más acérrimo enemigo.
por Julian Cañas