Así lo manifestó Guillermo Rivas, unos de los pastores que colaboran con las tareas preventivas que lleva adelante la Dirección de Inclusión y Militancia social municipal. Esta iniciativa permitirá que los distintos  centros integradores comunitarios (CIC) de la ciudad brinden atención profesional y asistan a personas  en situación de consumo de drogas.

Desde hace tres años y medio, Guillermo Rivas está al frente  de  un centro preventivo que funciona en el barrio “17 de Octubre”. Allí el asiste a 25 jóvenes de la zona. Desde ese lugar no solo abre las puertas de su iglesia para brindar un acompañamiento espiritual, sino que también apoya a los chicos con problemas de adicciones durante su proceso de inclusión social.

Guillermo relata que desde su llegada al barrio se topó con una dura realidad, las adicciones. “Las madres y  el resto de  los vecinos solicitaron ayuda en nuestra iglesia, nos pedían que los saquemos  a los jóvenes de las esquinas, que los contengamos. Fue entonces cuando comenzamos a trabajar con esta problemática. De manera conjunta con el área de Militancia Social de la Municipalidad comenzamos a abrir espacios para que los jóvenes se capaciten y aprendan un oficio, ya sea desde albañilería, carpintería, panadería”, recuerda.

“Si bien recuperar a los jóvenes de las adicciones es un trabajo lento, hemos visto grandes logros. Somos testigos de casos en donde rescatamos a personas en situación de calle y después de un tiempo comenzaron a recuperarse y a mostrar interés y voluntad por recobrar su vida”, afirmó Rivas.

Sobre la inauguración de la panadería que realizó el intendente en la jornada de ayer destacó: “Estamos muy contentos, los jóvenes ya venían trabajando con repostería. Ayer estábamos muy emocionados porque nos dieron equipamiento y herramientas para seguir adelante con este proyecto”, para luego agregar: “Comenzamos a ver más oportunidades de salida laboral para los chicos. Yo creo que este es el primer peldaño para su recuperación. Lo que estamos haciendo es apostar al futuro”. 

Por su parte el director de Inclusión y Militancia Social, Adolfo Rosas, explicó que  “hoy lo que planteamos con el intendente es fortalecer el trabajo que se viene realizando en la ciudad, en materia de lucha contra las drogas.

El plan de fortalecimiento de las acciones

Según detalló Rosas, “hasta ahora se cumplieron las distintas etapas de los tratamientos que se realizan para los chicos que ya están incluidos, “estamos en una etapa de ‘pre alta’, que significa que el chico va a tener que demostrar cuál es su voluntad real de cambio, después de todo lo recibido durante el proceso de tratamiento”, puntualizó.  

Luego agregó que, “paralelamente, teniendo en cuenta que vamos a tener los equipos de trabajos en los Centros Integradores Comunitarios, desplegaremos una tarea jurisdiccional territorial, que tiene como enfoque visibilizar a aquellos chicos que están en situación de consumo en las calles. Vamos a ir en búsqueda de ésos chicos para poner en disposición de este equipo de trabajo. Vamos a entrar a los domicilios por que la idea es tener una visión de la terapia domiciliaria”, detalló el funcionario.

Recomendaciones

Al respecto, Adolfo Rosas explicó que “uno de los grandes defectos que tiene la droga, tiene que ver con que, muchas veces los jóvenes que caen situación de consumo, están solos porque su familia  los abandona. Para ello es necesario trabajar para el núcleo familiar se comprometa y sea un sostén en el proceso de recuperación de la persona”.