El ex titular del partido lo dijo a primera hora de la tarde de este domingo que había sido citado a la Quinta de Olivos. Tenían pensado ofrecerle el Ministerio de Defensa, que en la actualidad ocupa su correligionario, Oscar Aguad. No es la primera vez que este aliado le dice no a un ofrecimiento de Mauricio Macri; antes de asumir en la Rosada, a fines de 2015, se había anunciado que sería ministro de Justicia, pero luego adujo motivos personales y lo descartó. 

Y justamente la cartera de Justicia es la que produjo otra confirmación, ya entrada la noche de este domingo. Allí seguirá Germán Garavano. Una de las versiones que viene circulando desde hace varios días -y hasta semanas- hablaba de un fuerte recorte en el presupuesto de este ministerio, lo que disparaba rumores sobre una salida de Garavano.

Por el momento, se sabe que el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, le ofreció el cargo de canciller a Alfonso Prat-Gay, pero aún no está ratificada su vuelta. Las conversaciones están avanzadas e incluso el actual ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Faurie, está camino a Buenos Aires y se haría cargo de parte de la organización del G20, como una salida elegante. Pero al menos hasta las 20, Prat-Gay no había sido convocado a Olivos para cerrar su vuelta. 

En cuanto al área económica, luego de fuertes versiones sobre otro regreso, el de Carlos Melconian, durante la tarde se confirmó que Nicolás Dujovne seguiría como ministro de Hacienda e incluso se detalló que viajará con el titular de Finanzas, Luis Caputo, a negociar el nuevo acuerdo con el FMI, desde el martes. 

También se confirmó el desplazamiento de los vicejefes de Gabinete, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, lo que implica un fuerte golpe para su jefe directo, Marcos Peña. Como consuelo, a ambos les ofrecieron dos cargos de menor incidencia. Lopetegui parecía más entusiasmado con seguir.
La negativa de Sanz, uno de los fundadores de Cambiemos, junto a Macri y Elisa Carrió, había desatado la furia de la líder de la Coalición Cívica, que lo ubica como uno de sus principales enemigos internos. Ya Carrió debió digerir la salida de Lopetegui y Quintana, a quienes calificó como "los mejores funcionarios" del Gabinete. Con Sanz, al menos tuvo una alegría.

Se confirmó que las carteras de Trabajo y Agroindustria quedarán subsumidas dentro del Ministerio de Producción, comandados por Dante Sica. Al momento, ni Jorge Triaca ni Luis Miguel Etchevehere confirmaron si aceptan continuar como secretarios. Quienes sí aceptaron continuar en el Gobierno a pesar de que sus reparticiones serán degradadas a secretarías son Sergio Bergman y Pablo Avelluto. Bergman será secretario de Medio Ambiente bajo la órbita del Ministerio del Interior, mientras que Cultura quedará bajo la órbita del ministro de Educación Alejandro Finocchiaro, quien también absorberá la cartera de Ciencia y Tecnología. 

Sin embargo, a diferencia de Avelluto, Lino Barañao no aceptó el cambio y dejará el ministerio que comanda desde que fue creado por Cristina Kirchner, el 10 de diciembre de 2007.

A pesar de las versiones que indicaban que dirigiría una gran empresa estatal, Mario Quintana es otro que dejará de pertenecer al Gobierno como funcionario; el otro vicejefe de Gabinete, Gustavo Lopetegui, continuará como asesor presidencial.

Cuando restan prácticamente 12 horas para el anuncio, aún se desconoce cuál será el destino del Ministerio de Energía -y de su titular Javier Iguacel-: podría quedar bajo la órbita de Dujovne o ser subsumido por el Ministerio de Transporte, a cargo de Guillermo Dietrich.

Por último, en reemplazo de Quintana y Lopetegui asumirá Andrés Ibarra, otro de los hombres de confianza de Macri y que se queda sin ministerio de  Modernización.