Con 1355 cabezas, los novillos lograron un máximo de $37,70 por kilo para un lote con 457 kilos de promedio. Le siguieron, $37,50 con 431 y con 440 kg, y $35 por 6 de 441 a 484 kg.

En la venta de las mejores vacas se pagó hasta $31,20 con 444 kg y $29 por 4 lotes de 450 a 547 kg.

Entre los mejores registros asignados a las haciendas livianas se destacaron los siguientes: en terneros, $44 con 301 kg y $43,70 con 330 kg; en terneras, $44,50 con 301 kg y $42 con 290 y con 322 kg; en novillitos, $41,50 con 352 kg y $40,20 con 389 y con 395 kg, y en vaquillonas, $39,50 con 357 y con 369 kg, y $34 por 7 lotes de 370 a 411 kilos.

LOS FACTORES:
Diversos y válidos argumentos establecieron subas de precios, especialmente para la hacienda destinada al consumo interno. Cotizaciones que se encuentran retrasadas y no le permiten al productor poder sostener sus costos.

Por otra parte, la proximidad de un feriado largo y el mayor porcentaje de vacas que ingresaron a este recinto de operaciones, vendidas con menor interés y el desabastecimiento de los compradores, fueron indicadores que también impulsaron una puja muy activa a lo largo de toda la rueda de operaciones.

La jornada tuvo además, competencia que se puede considerar como no menor, ya que la búsqueda de los mejores conjuntos se consolidó de manera visible. 

Habrá que tener presente y esperar el comportamiento con suma atención de los mostradores, cuando los precios que se pagaron en Liniers sean trasladados para su aplicación en la etapa final de la comercialización.