Paul Singer, dueño del NML, uno de los holdouts que litigan con la Argentina por la deuda impaga, presentó hoy un recurso de emergencia ante la Justicia de los Estados Unidos para que no permita la salida de Guido Forcieri "hasta tanto no informe sobre el paradero de los activos que podrían estar bajo embargo".

Forcieri, recientemente removido de su cargo en el Banco Mundial, está procesado en la causa Ciccone como "partícipe necesario del delito de negociaciones incompatibles". Está acusado de "torcer la voluntad de la Administración Pública" en dos tramos del levantamiento de la quiebra de la empresa Ciccone Calcográfica cuando se desempeñaba como jefe de Gabinete del Ministerio de Economía durante la gestión de Amado Boudou.

Forcieri "ha ignorado hasta ahora una citación para brindar información sobre sus bienes y no se presentó a una deposición de cargos", informaron agencias internacionales. Según los abogados de NML, "tiene planes inminentes para salir del país de forma permanente".

A comienzos de octubre había trascendido que Singer pidió al juez Thomas Griesa, quien lleva adelante la disputa por la deuda impaga, que investigue a Forcieri. El fondo que dirige inició una pesquisa para rastrear activos plausibles de embargo luego de que el país haya caído en default "selectivo".