Legisladores provinciales del Frente de Todos preparan en estos días el texto de un proyecto de Ley que busca una suba extraordinaria de la alícuota del Impuesto a los Ingresos Brutos del 7% al 12% que se aplica a la actividad bancaria. La iniciativa, que busca ser una respuesta de emergencia ante la caída de la recaudación y la coparticipación, se suma a la de otros distritos que subieron la carga impositiva al sector financiero porque entienden que no se vio afectado por el freno económico que generó la pandemia de coronavirus COVID-19. La intención oficial, que ya fue presentada al gobernador Axel Kicillof, es buscar aprobar cuanto antes la iniciativa, a pesar de las quejas de las entidades que señalan que sólo servirá para encarecer el crédito.
La legisladora oficialista Valeria Arata es la encargada de coordinar la redacción del proyecto en base a las iniciativas de distintos de sus pares. El trabajo está siendo supervisado también por Federico Otermin, presidente de la Cámara de Diputados provincial, y por Facundo Tignanelli, jefe de la bancada del Frente de Todos.

Aunque el texto modifica la aplicación del impuesto provincial para distintos sectores, el espíritu del proyecto apunta más que nada a la actividad de los bancos. La estimación de los legisladores es que el aumento de impuestos podría suponer entre $ 4.500 millones y $ 5.700 millones de recaudación extra para este mismo año.
La emergencia por la pandemia es la principal justificación para el aumento impositivo, pandemia que según explican en el oficialismo no afectó al sector financiero que pudo mantener su actividad en medio de la cuarentena, por eso el tratamiento buscaría ser urgente.

El dinero tendría como destino un “Fondo Solidario COVID-19” que tiene como objetivo destinar fondos para hospitales, servicios de salud, asistencia a sectores vulnerables.

Otro rubro afectado sería el de proveedores de servicios de Internet, con una suba del 4% al 6%, pero sólo aplicada a quienes hayan facturado más de $ 500.000 durante 2019. El texto también bajaría la alícuota al 0% para todos aquellos contribuyentes que hayan facturado menos de $ 500.000 el año pasado, sin importar el rubro.

Legisladores del bloque del Frente de Todos presentaron el borrador del proyecto a asesores de Kicillof este último fin de semana.
El aumento de impuestos provinciales tiene a los bancos a la defensiva. La iniciativa bonaerense se suma a recientes subas en la provincia de La Pampa. En el sector se defienden diciendo que el Impuesto a los Ingresos Brutos encarece el crédito, justo en momentos en los que el Banco Central fuerza a los bancos a conceder créditos a tasa cero a monotributistas y autónomos, además de impulsar préstamos al 24% para pequeñas y medianas empresas.

El peso de estos impuestos, argumentan, terminará recayendo sobre los beneficiarios de sectores afectados por el parate económico que genera el aislamiento social preventivo y obligatorio decretado como respuesta a la pandemia.

La iniciativa bonaerense tiene antecedentes recientes. El gobierno pampeano decidió como medida de emergencia ante la pandemia de la COVID-19 subir la alícuota de Ingresos Brutos de 9% a 14%, solo para los bancos privados, que tienen 17 de las 74 sucursales bancarias del distrito. El resto corresponden al Banco Nación y al Banco de la Provincia de La Pampa.

 La cámara de bancos privados de capital nacional, Adeba, criticó en un informe e encarecimiento del crédito que generan los aumentos de impuestos provinciales
En Mendoza, mientras tanto, el justicialismo presentó un proyecto para llevar al 12% la alícuota para los bancos. En Santa Fe, aparecieron propuestas en el mismo sentido, apuntando tanto a los bancos como a las empresas del sector agropecuario.

También aumentos en las tasas municipales de Hurlingham y Lanús afectaron al sector financiero.

La cámara que agrupa a los bancos privados de capital nacional, Adeba, publicó en los últimos días un informe que critica el efecto de los aumentos de Ingresos Brutos. “El Estado Nacional, el Banco Central y los bancos están realizando grandes esfuerzos para llegar a las empresas con financiaciones a tasas bajas, para ayudarlas a superar la actual crisis. Una baja de los Ingresos Brutos sobre los préstamos sería un aporte concreto de los estados provinciales para ayudar a las empresas y comercios a superar la actual situación, significaría un menor costo del crédito y de esa forma las provincias potenciarían los esfuerzos que se hacen a nivel nacional”, afirmó.