El boxeo tiene reglas claras para proteger a quienes lo practican. Pero también hay reglas no escritas que se rigen por la ética, el sentido común y el cuidado de los púgiles. Una de ellas marca que no es correcto organizar un combate entre boxeadores de diferente currículum. El resultado se vio en California, porque la experimentada Seniesa Estrada demolió en 7 segundos a Miranda Atkins. Y se armó la polémica alrededor del nocaut más rápido en la historia del boxeo femenino.

En una velada organizada por la empresa Golden Boy Promotions, de Oscar De la Hoya, en el Fantasy Springs Casino de Indio, se esperaba la pelea de fondo entre Vergil Ortiz y Samuel Vargas. Pero el mundo se agitó por las imágenes virales con el nocaut de Estrada.

La dramática imagen de la derrotada Adkins, quien no reaccionaba.

"Super Bad", como la llaman a la minimosca, tenía un récord invicto de 18 peleas y una experiencia muchísimo mayor que su derrotada. Es que Atkins llevaba un 5-0, pero ante cuatro debutantes y una victoria incluso ante una misma rival.

El árbitro levanta el brazo derecho de la ganadora Estrada.

Estrada era clara favorita cuando sonó la campana. Se adelantó, conectó tres golpes seguidos sobre Atkins, que quedó groggy. La ganadora repitió los impactos enseguida y su rival quedó tirada en la lona, con su cabeza debajo de las sogas y sus manos en alto. Una paliza innecesaria.