El Gobierno nacional informó esta noche, a través de las redes sociales de la Casa Rosada, que "la Argentina ha decidido abstenerse en la votación que tendrá lugar el próximo sábado para elegir al presidente del Banco Interamericano de Desarrollo".

Asimismo, desistió esta noche de presentar al secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, como postulante para ocupar la Presidencia del BID, debido al escaso apoyo regional que obtuvo la estrategia diseñada por Alberto Fernández.

De esta manera, el candidato de Donald Trump, Mauricio Claver-Carone, quedó sin competidores que puedan trabar su futura designación como titular del organismo internacional de crédito.

Las elecciones para definir al sucesor de Luis Moreno en el BID se darán entre el 12 y 13 de septiembre y en cuanto asuma Claver-Carone se producirá un hecho histórico ya que desde su creación en 1959 este organismo internacional regional nunca fue dirigido por un norteamericano.

Claver-Carone es el principal asesor del gobierno norteamericano para América Latina. Su postulación contaba con una abrumadora mayoría de votos de países de la región por lo que Alberto Fernández desistió de llevar a Béliz a esa batalla.

La Argentina intentó postergar la votación del titular del BID pero no lo logró a pesar de los esfuerzos, ya que solo tenía el respaldo de apenas cuatro representantes del directorio, provenientes de Chile, la Unión Europea, México y Costa Rica.

Mientras tanto, el representante de Trump contaba con el apoyo de una abrumadora mayoría conformada por Brasil, Bolivia, Paraguay, Uruguay, Colombia, Ecuador, Bahamas, El Salvador, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, Panamá, República Dominicana, Surinam, y Venezuela.