Embarques de granos se encontraban detenidos en puertos de Argentina debido a una huelga de 24 horas que realizaba el lunes el gremio de trabajadores técnicos portuarios Urgara por un reclamo salarial y de horas laborales, dijeron cámaras portuarias del país.

Argentina es el tercer exportador mundial de soja y de maíz, y un proveedor global clave de trigo. Los miembros de la Unión de Recibidores de Granos de Argentina (Urgara) son trabajadores vitales en las operatorias portuarias ya que analizan las bodegas y los granos que se embarcan y que llegan a los puertos.

“Esta medida genera pérdidas económicas para el sector y para el país. Dificulta la operatoria y podría generar incumplimientos de compromisos comerciales internacionales”, dijo Martín Brindici, gerente general de la Cámara de Puertos Privados Comerciales (CPPC).

Urgara anunció la medida en las últimas horas el domingo, señalando que habían fracasado las negociaciones que hace semanas mantienen con empresas agroexportadoras por aumentos salariales y una reducción en la jornada laboral.

También señaló en un comunicado que el martes sus representes asistirán a una reunión con el Ministerio de Trabajo “para buscar respuestas ante nuestros pedidos” y describió la protesta como parte de un “plan de lucha progresivo”.

El gerente de la Cámara de Actividades Portuarias y Marítimas (CAPyM), Guillermo Wade, dijo que en la zona de Rosario -donde se embarca el 80% de los productos agrícolas de Argentina-, la medida afectaba a varias empresas, entre ellas las internacionales Cargill y ADM.

Por su parte, Urgara dijo que la huelga ha tenido un alto acatamiento por parte de los los trabajadores que “apoyan y comparten nuestros reclamos”, al tiempo que destacó que la acción ha impactado la actividad en 16 terminales portuarias.

Las medidas de fuerza por parte de sindicatos son frecuentes en el sector agroexportador de Argentina, el principal motor de la economía del país y su mayor fuente de divisas.

Sin embargo, la protesta de Urgara se produce en un momento en que hay un menor flujo de granos a los puertos de Argentina, luego de que finalizaran hace meses la recolección de la soja y el maíz -los principales cultivos del país- y aún no ha comenzado la cosecha del trigo de la nueva campaña.