Desde Rosario de la Frontera, el ministro de Salud Pública de Salta, Juan José Esteban se refirio al actual panorama actual de la pandemia por coronavirus en la provincia, la cantidad de camas de terapia intensiva que se van incorporando en estos días, las nuevas medidas restrictivas, la firme intención de incrementar los testeos y la responsabilidad social.
El funcionario provincial señaló que “las clases presenciales se deben mantener” y que Salta no podrá comprar vacunas contra la COVID-19 por lo menos hasta fin de año. “La intención del gobernador (Gustavo Sáenz) fue comprar vacunas, tuve una reunión con el ministro de Economía, (Roberto) Dib Ashur, que se comunicó directamente con Nación y lamentablemente no es así”, manifestó.

¿Cuál es la situación sanitaria y epidemiológica hoy en la provincia?, ¿cuántas camas de terapia intensiva estiman incorporar en este tiempo?

Logísticamente estamos trabajando en base al crecimiento de la pandemia, hoy habilitamos el doble de camas en el hospital Papa Francisco, pasamos de 24 camas a 45 y 5 más de la unidad coronaria que están en reserva ante una eventual necesidad. Hoy el Papa Francisco es uno de los hospitales emblemáticos en la atención COVID, tanto en las internaciones como en la atención ambulatoria de los pacientes sintomáticos.

Estamos habilitando también las camas de los servicios de los hospitales Señor del Milagro, son prácticamente 30, se está instalando el tanque criogénico y la cañería de gases medicinales para cada una de las habitaciones. Ya teníamos habilitado a través del tanque criogénico y oxígeno las 36 camas del hospital anexo geriátrico del Señor del Milagro. 
En el San Bernardo tenemos una carpa instalada stand by sin ocupación alguna de momento con 56 camas, logísticamente nos conviene ahí. Va a ser una estación de tránsito de los pacientes que requieran terapia intensiva y se van a mantener ahí en forma transitoria hasta tanto se consiga la cama en terapia intensiva. 
¿Cuál es el nivel de ocupación de camas UTI actualmente?

Si hablamos de porcentajes nos ha bajado de 82 a 70 por ciento la ocupación de camas. Pero no nos olvidemos que está la otra pandemia, una enfermedad crónica no transmisible que es la que no hemos atendido durante mucho tiempo y es la que infarta, la que produce ACV, enfermedades metabólicas como la diabetes, comas diabéticos, enfermedades mentales, los accidentes, las enfermedades infecciosas como la tuberculosis, el dengue. 
El año pasado tuvimos en Capital una cantidad importante de casos de dengue, en este momento lo tenemos controlado, hay algunos brotes en Embarcación, Morillo, donde hemos mandado gente.
Con respecto a la pandemia estamos monitoreando y trabajando en prevención con hisopados en zona norte y sur, en los hospitales de Capital, en todos los centros de salud y hospitales del interior. Queremos dar batalla en la prehospitalaria, hacer un diagnóstico de los pacientes sintomáticos con hisopados, aislarlos y dar atención en el domicilio.

“En el interior, en el norte es mucho más difícil contratar un profesional. Hay que recuperar el recurso humano”.
 

La segunda ola para cuándo estiman llegue a Salta...

La segunda ola está en nuestro país, nosotros tenemos una situación especial en Salta, estamos prácticamente en penúltimo lugar. Pero somos conscientes de que tenemos una tasa de mortalidad alta, estamos en octavo, noveno lugar en el país. 

De cara al frío y a la segunda ola, en el peor escenario cuántos contagios y muertes por COVID tendría Salta...

El año pasado yo asumí el 9 de septiembre y el 23 ya habíamos llegado a tener 500 casos de COVID y 30 muertes diarias. La intención es trabajar fuertemente en prevención, hacer muchísimo hisopado para lo cual el gobernador ya dispuso 70 millones de pesos para la compra de PCR y de test rápido antígeno abbott y yo solicite a Nación el envío de 50 mil test rápido abbott también para la provincia. Nosotros queremos testear, trabajar en prevención, hacer diagnóstico precoz y el aislamiento inmediato. De esa manera vamos a evitar la circulación viral comunitaria.

Pero el escenario podría ser peor que el año pasado...

La verdad nos agarra con una economía en pleno funcionamiento, una flexibilización total, con presencialidad de niños en las aulas, tenemos que tomar las medidas restrictivas para evitar la circulación viral comunitaria. 
Es mucha la responsabilidad social que pueda tener cada uno de los salteños, eso es fundamental. El salteño tiene que tomar conciencia, acostumbrarse a convivir con el virus y adherir a los protocolos. Hoy no hay DISPO, no hay ASPO, hay RESPO, de responsabilidad ciudadana. 

Santiago Cafiero dijo que las provincias están habilitadas para comprarse las vacunas. Nosotros, ¿vamos a comprar vacunas?, ¿la Provincia inició gestiones con laboratorios?

La intención del gobernador (Gustavo Sáenz) fue comprar vacunas, tuve una reunión con el ministro de Economía, (Roberto) Dib Ashur, que se comunicó directamente con Nación y lamentablemente no es así. Está cerrada la importación, solamente van a recibir vacunas las naciones que ya hayan pagado las vacunas por lo menos hasta fin de año, o sea, lamentable, pero no hay posibilidad de comprar vacunas.

¿Tienen registro de cuántos vacunados se contagiaron después como el presidente? 

Sí hay, no son muchos. La vacuna lo que evita es la letalidad del virus, la persona que ha sido vacunada cursa la enfermedad del coronavirus como si fuera una gripe común, pero transmite el virus y se contagia. 

¿Usted coincide con las medidas tomadas o cree que tienen que ser más duras? Por ejemplo, cerrar todo una o dos semanas...

Hemos venido buscando un equilibrio económico, social, sanitario. Creo que hasta este momento lo venimos logrando de la mejor manera, es fundamental el acompañamiento social. Se hicieron medidas restrictivas, no se suspendió el comercio, creo que a pesar de que hay mucha molestia en los gastronómicos restringir desde las cero horas independientemente del rubro era fundamental, y la circulación a partir de las una de mañana nos ha dado muy buenos resultados. 
La restricción de 2 a 6 de la mañana incluso ha reducido accidentes, pero tenemos que prevenir las fiestas clandestinas y lo que habitualmente logra la transmisión viral masiva.

¿Y las clases presenciales deben seguir?

Las clases tienen que seguir, hay que ser criteriosos, responsables, hay que mantener la presencialidad de los niños en las escuelas, tenemos que ser cuidadosos en los protocolos. Estamos trabajando fuerte con Educación para que escuela que tenga problema, escuela que se analiza y se hisopa para ver cómo sigue. Lo hemos hecho en Iruya donde ha aparecido un brote de SARS-CoV-2 importante y donde hemos podido demostrar que la escuela primaria no tenía casos de contagios. La secundaria tenía dos directivos y dos alumnos, por ese motivo siguieron las clases presenciales en Iruya. Sí había una serie de contagios que venían de la compra de alimentos diarios en el mercado. Mandé un grupo de ocho personas a estudiar la situación epidemiológica del pueblo.

¿Y los colectivos?

El colectivo se sigue manteniendo como tal, las ventanas abiertas es fundamental. No es bueno tener las ventanas cerradas y ver vidrios nublados porque ahí sí pueda haber aerosolización, es una situación compleja en la transmisión viral.

¿Se pudo confirmar por laboratorio si las cepas Manaos o Británica están en Salta? 

Hemos mandado estudiar algunos pacientes al Instituto Malbrán (de Buenos Aires), todavía no tenemos resultados, pero hay casos que realmente nos sorprenden por la agresividad del virus y por el pronto deceso de los pacientes en cuanto a la evolución de la enfermedad y la falla multiorgánica. Hemos decidido hisopar a esos pacientes y mandar al Malbrán para ver si es otra cepa la que pueda estar circulando en la provincia. Igual creo que no hay que alarmar a la gente en este momento.

“Iniciamos un sumario al gerente saliente del hospital de Embarcación tras la muerte de un médico”.

¿Cómo se va a continuar con el orden de prioridades en la vacunación de COVID? El jueves el Senado dio media sanción al proyecto de ley para que el Estado le dé prioridad de vacunación a los sectores más vulnerables... 

Es lo que estamos vacunando. Los mayores de 70 son vulnerables, tenemos estadísticas que nos grafican que la mayor mortalidad, del 75% se dá en ellos. Creo que tenemos que apuntar fuertemente a la vacunación de los mayores, ahora estamos avanzando con los de 60 y después hay que seguir con las comorbilidades, diabéticos, obesos, y vamos a ir avanzando a medida que vengan vacunas. Ya tenemos vacunados a los dializados, los trasplantados, los pacientes que cohabitan los geriátricos, los maestros, seguridad, gendarmería. En el interior se está vacunando fuertemente. La intención es abrir otro centro de vacunación importante para que al momento de ingresos de la vacuna en gran escala podamos tener muchos frentes de vacunación, no solo centros de salud, hospitales, sino centros de referencias como lo es el Centro de Convenciones. Estamos buscando otro lugar.
 
El hospital Perón de Tartagal no tiene terapia para coronavirus por falta de especialistas en terapia...

Ha renunciado un médico terapista. Hablé con el doctor Payo (Santiago, es el gerente) hay que contratar, hemos sacado un llamado público para nombrar cinco cirujanos en el hospital, hay cirujanos que han renunciado también. 
La idea es recuperar el recurso humano de los hospitales del norte y darle dignidad laboral como corresponde.