El París Saint-Germain arrancó con todo: desde el primer minuto se paró en campo contrario y con posesión dominada intentó profundizar en los ataques, cosa que pudo concretar recién al minuto 23 cuando Ander Herrera la agarró de aire en la puerta del área, disparó y le dio al palo derecho del arquero, con la fortuna de que luego la pelota entró y le otorgó el 1-0 al visitante.
El ahogo no cesó. A pesar de estar arriba, continuó atosigando al rival y marcó el 2-0 a través de Mbappé, de cabeza, a los 36. Sin embargo, el Brest creó una gran jugada colectiva y, luego de un pase de taco, Honorat pudo marcar el descuento antes del final del primer tiempo.
Ya en la segunda parte, si bien el elenco de Pochettino se dispuso en ataque, no tuvo la misma agresividad que en la primera mitad. Recién a los 27, un tiro sensacional de Gueye desde larga distancia iba a poner el 3-1 para el elenco visitante. Pero no iba a tener mucha tranquilidad adicional debido a que a los 40 Mounie la bajó de pecho y estableció el 2-3. En ese momento, icardi salió con molestias en su hombro.
Faltaban pocos minutos y el local tuvo un córner para empatarlo, pero fue despejado y arrancó la contra: Di María la tomó, hizo una pared con su compañero y la picó rememorando el gol de la final de la Copa América ante Brasil para poner el 4-2 final. Así, quedó puntero del campeonato con puntaje ideal.