En Tucumán se inauguró la planta piloto de Biotecnología en Proimi, que depende del Conicet y en la que hay 30 investigadores, 40 becarios, 21 técnicos y 3 administrativos, que llevan adelante desarrollos con el fermentador más grande del país. “Estas inversiones las hace el Estado y no el sector privado”, destacó la Jefa del Estado al referirse a la nueva tecnología que permitirá desarrollos en sectores como, por ejemplo, el farmacéutico.

“Necesitamos mucha inversión en desarrollo en todo el país, y vemos que no la tiene el sector privado pese a que la industria farmacéutica es muy importante y gana mucho dinero en nuestro país. Vemos que estas inversiones siempre las termina haciendo el Estado”, aseguró Cristina. Dijo que es mentira que para aumentar la inversión sea necesario achicar la demanda, y afirmó que “para aumentar la inversión hay que disminuir un poquito así la rentabilidad o traer la plata que se llevaron afuera”. Cristina cuestionó así a quienes plantean “achicar la demanda” porque explicó que ese planteo implica siempre “achicar los salarios, no hay ninguna otra manera”. “La única manera de achicar la demanda es reduciendo los salarios nominalmente o por poder adquisitivo.

El que les diga otra cosa les miente”, reforzó la primera mandataria. Cristina remarcó la importancia de que los investigadores del Conicet hayan resistido cuando durante la aplicación de las políticas económicas neoliberales les quisieron tirar abajo el Instituto de investigación. “¡Menos mal que resistieron! Hoy son pilares fundamentales en la inversión estatal y se ha transformado en la principal política pública de gobierno el invertir en ciencia y tecnología”, enfatizó. Explicó que la inversión en ese centro de investigación no es sólo para el Estado sino que derrama en el sector privado. “El Estado derrama, los privados no derraman. El único que derrama es el Estado”, dijo. La Presidenta explicó que además de las videoconferencias con Avellaneda y Tucumán se iba a establecer una comunicación con Misiones pero que una fuerte tormenta lo impidió. “Lo que íbamos a inaugurar hoy en Misiones tenía que ver con agricultura social, y si bien lo dejamos para el próximo acto les quiero comentar algunos números”, dijo. Explicó que “en leche en 2002 los argentinos consumían 160 litros por persona, y en 2014 están consumiendo 210 litros por habitante. Esto significa que más gente pudo comer más manteca, más queso, mas yogur”. Cristina indicó que además del consumo aumentó la producción: “En 2002 se producía 1.575 litros de leche por tambo en promedio, y 11 litros por vaca.

Hoy se producen 2.736 litros por tambo por día en promedio y 17 litros por vaca”. “Aumentamos producción y consumo. Es mentira que cuando achicas la demanda mejoras la inversión. ¿Para qué van a invertir si no tienen para quién producir, más en un mundo donde han bajado los precios de las commodities?”, reflexionó y dijo: “Qué nadie nos quiera vender pescado podrido, no estamos dispuestos a indigestarnos devuelta”.

Por otro lado, Cristina indicó que las inversiones del sector industrial se vieron beneficiadas por la política de los Bono K que son una compensación para los sectores que deben competir con industrias de países que hacen dumping. “¿Sabías Débora (Giorgi, ministra de Industria) que Brasil está estudiando esta política para aplicarla? Todos los países defienden sus industrias y le ponen plata a sus fierros y nosotros lo tenemos que seguir haciendo con mayor profundidad en la Argentina”, afirmó.