Silvina Batakis eligió un tema espinoso para la política económica del gobierno de Alberto Fernández para emitir su primer mensaje al mercado: el déficit fiscal. Minutos después de haber jurado como nueva ministra de Economía, dijo que su mandato tendrá como tema prioritario “el manejo fiscal”.

Batakis dio además su visto bueno al acuerdo vigente con el Fondo Monetario Internacional mientras a unos pocos metros de distancia algunos ejecutivos del sector privado aseguraban que esperan ser convocados por la nueva jefa del Palacio de Hacienda para iniciar una nueva etapa de diálogo tras la salida de Martín Guzmán al frente del equipo económico. El FMI también la "saludo"

La llegada de “La Griega” al gabinete nacional estuvo enmarcado en una fuerte presencia de referentes políticos del Frente de Todos en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, lo que marca lo sintomático de la renuncia de Guzmán. Como un espejo, el saliente ministro no contaba con más apoyo que el del propio Alberto Fernández, sin que pudiera encontrar respaldo en ningún otro sector en la coalición, salvo, quizás, algunos dirigentes del sindicalismo y referentes empresarios.

Nicolás Stulberg

Por esa razón la jura de Batakis estuvo plagada de mensajes políticos y de bendiciones desde todos los sectores del Frente de Todos. Algunos de los integrantes del puñado de empresarios que se hicieron presentes en la Casa Rosada también tuvieron posibilidad de intercambiar alguna palabra con la nueva jefa del Palacio de Hacienda. Algunos de ellos, al finalizar el acto, mencionaban en los pasillos mientras buscaban la salida, que esperan un llamado inminente de Batakis para retomar el diálogo.

Uno de ellos fue Daniel Funes de Rioja, presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA). “La situación es compleja, pero la Argentina esas complejidades tiene que resolverlas, hay oportunidades en el mundo que si no las aprovechamos, pasan. Es muy importante traer tranquilidad macroeconómica a la Argentina y previsibilidad”, mencionó ante un grupo de periodistas.

Uno de los que llegaron a saludar a Batakis tras la jura fue el director de IRSA, Eduardo Elsztain, sentado en una de las últimas filas del auditorio en el Salón Blanco, muy cerca del presidente de ABA Claudio Cesario, empresario que representa a los bancos de capital extranjero, Luis Galli (Newsan), Hugo Eurnekian (Corporación América) y el presidente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), Mario Grinman, entre otros.

Eduardo Elsztain (Nicolás Stulberg)

Entre los empresarios y algunos funcionarios todavía permanecía el shock por la salida de Guzmán. Un alto funcionario del Gobierno, que mantuvo a lo largo de estos dos años y medio de gestión del Frente de Todos un diálogo casi diario con el ex ministro de Economía, manifestaba a quien quiera preguntarle su malestar con el modo en que se dio su salida. “Estuvo mal, más por la forma que por el momento”, renegaba ante la consulta de Infobae.

Uno de los que estuvo presente en el acto de inicio de gestión de Batakis fue el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, cuyo puesto como titular de la autoridad monetaria estuvo en la mira también en los últimos días de frenesí. Pesce fue señalado como el funcionario que “propuso” al jefe de Estado a la ex ministra de Economía bonaerense para asumir en el Palacio de Hacienda. En un breve diálogo con este medio reconoció que acercó el nombre de Batakis pero le reconoció que “es una funcionaria muy capaz y muy conocida desde hace tiempo” y relativizó su papel en la designación.

Pesce, que sostuvo hasta el final muchas diferencias con Martín Guzmán, se reunió este mediodía con Batakis y, minutos después del acto, volvió a hacerlo, en esta ocasión con el ministro de Desarrollo Productivo Daniel Scioli. La cuestión del esquema de pagos de importaciones fue el último gran tema que esa tríada de áreas del Estado intentaron coordinar hace algunas semanas, en un contexto de sequía de reservas y con las meta de acumulación de divisas con el FMI pisando los talones. Cerca de Pesce aseguran que ya empezó el trabajo conjunto con la nueva jefa del Palacio de Hacienda y que la reacción del mercado de este lunes era “esperable” en un contexto de renuncia del principal ministro del gobierno.

(Nicolas Stulberg)

En ese primer contacto entre las cabezas de Economía y del BCRA, uno de los temas en conversación fue el de un “programa fiscal sustentable”, según las palabras que eligió la comunicación oficial. En esa dirección fue el primer mensaje de Batakis como nueva ministra: en poco más de 150 segundos de discurso mencionó en tres ocasiones la necesidad de un mayor equilibrio fiscal y también sobre la continuidad del programa firmado con el FMI, la necesidad de mayores exportaciones, de crear puestos de trabajo y de “revalorizar la moneda”.

Habrá distintos temas en la agenda urgente de Batakis al frente del principal ministerio del gabinete. Uno de ellos, que estaba en los planes de Guzmán hasta el sábado era retomar este miércoles el diálogo con el Club de París y cerrar la tercera renegociación de la deuda en moneda extranjera. Su viaje a la capital francesa, está claro, quedó trunco por su renuncia pero hubo contactos en las últimas horas para dar continuidad en esas gestiones.

Sergio Massa y Daniel Funes de Rioja, presidente de la UIA (Nicolás Stulberg)

Batakis tendrá por delante, además, la tarea de edificar su equipo de colaboradores más cercanos tras la salida masiva de todo el plantel de Guzmán. Los puestos más relevantes serán los de las secretarías de Hacienda y de Finanzas, esta última la encargada de conseguir el financiamiento en pesos en el mercado local y de dirigir la relación con los inversores.

El puesto de Hacienda también guarda relevancia, y más en un contexto de estrechez fiscal para los próximos meses -un pedido del FMI y la promesa de Batakis en su primera aparición como ministra- en que el Gobierno deberá cumplir con la meta de reducción del déficit primario con el organismo. El único funcionario del equipo de Guzmán al que se lo vio ingresando a la Casa de Gobierno este lunes aunque no estuvo presente en el acto en el Salón Blanco fue, precisamente, el renunciado secretario de Hacienda Raúl Rigo.

“El mercado no es una entelequia, son personas que especulan”, dijo ayer en una nota con C5N donde dio alguna definición más de sus planes.

“Los dólares que tiene Argentina tienen que estar disponibles para el crecimiento del país. Tenemos que planifica y ser eficiente, y eso lo tenemos que hacer también con los empresarios. No es sólo un tema del mercado”, agregó. Confirmó que está “cómoda” con este el dólar oficial y que seguirá con la segmentación tarifaria, aunque no dio mayores detalles al respecto.