Cada vez que Floyd Mayweather Jr. se sube al ring, el mundo del boxeo pone sus ojos en él a causa del talento que demostró a lo largo de su carrera y el monstruo mediático en el que se convirtió. Por cuarta vez desde su retiro, enfrentó una pelea de exhibición, esta vez ante el japonés Mikuru Asakura, luchador de artes marciales mixtas, al cual derrotó por nocaut en el segundo round. Como es costumbre, el dinero que lo llevó a volver a ponerse los guantes se trató una cifra millonaria.

Bajo la atenta mirada de Manny Pacquiao, que se encontraba en primera fila viendo a su aprendiz, Floyd logró conectar un derechazo al rostro con el que mandó directo a la lona al asiático, quien intentó levantarse pero, cuando lo hizo, el árbitro Kenny Bayless consideró que no estaba en condiciones de continuar.

La pelea se llevó a cabo en Japón, bajo las reglas del boxeo y los espectadores pudieron disfrutar un puñado de intercambio de golpes antes de que el estadounidense cerrara el choque a su manera. En total, por cuatro minutos sobre el cuadrilátero, Money ganó 20 millones de dólares. El peleador oriundo de Michigan defendió su estatus de invicto, que logró durante su carrera profesional con un impresionante récord de 50 victorias, además de las victorias en las tres exhibiciones anteriores.
Sin embargo, el número final no queda ahí. Las butacas de ringside se vendieron por hasta 1 millón de yenes (7 mil dólares) cada una y el evento cosechó bonus por los derechos de transmisión. La pelea, que fue organizada por Mayweather Promotions y la empresa japonesa Rizin Figthing Federation, habría alcanzado un alto número de venta de Pay per View y según trascendió Floyd regresó a Estados Unidos con 200 millones de dólares en la cuenta bancaria por su sencilla victoria.

Vale recordar que la primera batalla de exhibición fue ante Conor McGregor en 2017, luego ante Tenshin Nasukawa en 2018 y la última fue con el youtuber Logan Paul en 2021. Por ser una forma de negocio que genera mucho dinero en escasos segundos encima del ring a un ritmo que el ex campeón invicto está más que acostumbrado, Mayweather ya tiene asegurada su próxima edición el 13 de noviembre, cuando se enfrentará a otro youtuber: el británico Deji en Dubái. Dada la ubicación del enfrentamiento, se espera que Floyd haga una vez más uno de sus negocios y volverá con los bolsillos llenos de Medio Oriente.

Ya en el segundo, mientras el nipón intentaba penetrar la defensa de Floyd con jabs y directos, el estadounidense comenzó a soltar algunos golpes potentes que alcanzaron a levantar a la afición presente en el recinto.

Finalmente, tras un intercambio de fuertes trompazos, el ex campeón invicto  logró conectar un derechazo al rostro con el que mandó directo a la lona al asiático, quien intentó levantarse pero cuando lo hizo, el árbitro Kenny Bayless consideró que no estaba en condiciones de continuar.

Esta fue la cuarta presentación del ex boxeador tras su retiro como profesional. Cabe destacar que antes de subir al ring con Asakura, Mayweather había derrotado en un ring al joven kickboxer japonés Tenshin Nasukawa (20 años en aquel momento) después de solamente unos pocos golpes y dos minutos durante un combate de exhibición en Japón en 2018.

Pese a intentarlo, Sakura no logró incomodar a Mayweather (AFP)

Según trascendió, Floyd Mayweather cobrará unos 200 millones de dólares por su presentación en Japón. Sin embargo, el ex púgil aseguró que no hizo esto por el dinero sino “para viajar y conocer gente”. Los tickets para verlo en directo se vendieron por hasta 1 millón de yenes (7 mil dólares) y el evento contó con varios contratos de TV.

La última pelea como profesional de Money fue en 2017, cuando volvió de su retiro para enfrentarse a la estrella de UFC Conor McGregor, quien sacó su licencia en ese deporte y se subió al ring para caer derrotado por KO técnico en el décimo asalto.

Éste evento en Japón se llevó a cabo en medio de un nuevo acuerdo entre las dos estrellas para una posible revancha en 2023. Hasta el momento todo se trata de un cruce de declaraciones y provocaciones en redes sociales. “No estoy interesado”, fue el último comentario del irlandés en sus redes sociales a las palabras de Mayweather.

Sin embargo, unas horas después de la victoria del estadounidense, el de Dublín compartió una foto suya con los guantes de boxeo puestos.