Mientras que los servicios de emergencia buscaban a posibles supervivientes, empiezan a cuestionarse la construcción del edificio,

un complejo de torres cuyos pisos superiores aplastaron a los inferiores tras la sacudida del seísmo de magnitud 6,4 que ocurrió a las 4.00 hora local (2000 GMT), en el comienzo de las fiestas por el Año Nuevo Lunar.

Seis de las víctimas, entre que las que se encontraba un bebé de apenas 10 días, pertenecían al edificio derrumbado.

Equipos de rescate montaron escaleras hidráulicas y grúas para revisar los escombros del edificio y rescataron más de 220 personas, de los cuales decenas fueron llevados a hospitales, dijo un oficial del departamento de bomberos.

En otras partes de la ciudad de 2 millones de habitantes, varios edificios quedaron inclinados en ángulos alarmantes, pero un funcionario del departamento de bomberos dijo que los esfuerzos de rescate se centraban por completo en el bloque de apartamentos, donde ropa de niño ondeaba desde un tendedero en el primer piso y el olor a gas impregnaba el aire.

"Estaba viendo televisión y después de un repentino temblor escuché una explosión. Abrí mi puerta de metal y vi que el otro edificio se caía", dijo un vecino de 71 años que se identificó como Chang.

El hombre dijo que buscó algunas herramientas y una escalera y sacó algunas barras de la ventana abierta para rescatar a una mujer que lloraba pidiendo ayuda.

"Me pidió que volviera y rescatara a su esposo, hijo, pero tenía miedo de una explosión de gas, así que no fui. En ese momento había más gente pidiendo ayuda, pero mi escalera no era suficientemente larga", añadió.

El seísmo tuvo su epicentro a unos 43 kilómetros al sudeste de Tainan, a una profundidad de 23 kilómetros, informó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS por su sigla en inglés). Varias réplicas se sintieron después, dijo el Comité Central de Clima de Taiwán.

Las autoridades dijeron que en el edificio de apartamentos que colapsó había 92 hogares habitados y vivían 256 personas, pero que no sabían cuántos estaban en el lugar cuando ocurrió el seissmo. El departamento de bomberos dijo que 115 personas habían sido trasladadas a los hospitales de todo Tainan.

El presidente de Taiwán, Ma Ying-jeou, en declaraciones a periodistas en la capital antes de ir a Tainan, dijo que las autoridades no estaban claras sobre la magnitud del desastre. "La situación de desastre aún no está muy clara. Haremos todo lo posible para rescatar (a supervivientes)", aseguró.

Taiwán está sobre el "Anillo de Fuego del Pacífico", una zona de alta actividad sísmica. La televisión citó a residentes de Tainan que dijeron que el sismo se sintió más fuerte que el de 1999 de magnitud 7,7 que dejó más de 2.400 muertos.