Cuando pierde el control, lo que le ha sucedido repetidas veces, le puede costar el partido a su equipo. Cuando está enfocado, es uno de los mejores del mundo en su posición. Anteayer, Tomás Lavanini (23 años, 2,01m y 130 kilos) mostró su costado bueno y fue uno de los puntales para que los Jaguares consiguieran su mejor victoria en el Super Rugby.

El éxito por 29-11 ante los Bulls, que si ganaba entraba en zona de playoffs, fue un bálsamo para un equipo que venía golpeado y ahora espera, a partir de este triunfo, cerrar una temporada aciaga de manera positiva.

"En el vestuario luego del triunfo estábamos todos muy contentos, había música. Es algo que hace mucho que no se veía", describió el segunda línea de Hindú. "Queremos disfrutar este momento, pero sabemos que no hay que bajar los brazos. Hay que seguir entrenándose muy bien."

El triunfo, tercero en la temporada en 13 partidos, le permitió al plantel reivindicarse en parte de las últimas actuaciones, incluidas las derrotas de los Jaguares ante Lions y Kings y la ventana de junio de los Pumas, que se cerró con una goleada en contra ante Francia. "Concretamos un gran partido. Nos merecíamos la victoria después de la última gira a Sudáfrica, en la que hicimos varios papelones y no tuvimos un gran juego", aceptó Lavanini. "Esta vez demostramos el rugby que queríamos jugar desde el principio. En todos los partidos metimos un buen ritmo; quizá no se nos daban los resultados, pero esta vez no regalamos ni un segundo, sometimos al rival todo el tiempo y ésa fue la clave del partido. Fue un aprendizaje de cómo tenemos que seguir jugando".

-Venían fallando en el tackle, pero esta vez fueron casi infalibles.

-Con la defensa estábamos en deuda y salimos a buscarlos abajo para derribarlos. Estábamos en deuda con todo: el scrum, el maul, el line. Se vio que estuvimos muy sólidos en el scrum, muy bien en el maul también, impecables en la defensa del line. Hay que seguir laburando en los detalles y tratar de no cometer tantos penales.

-¿Cómo manejaron el tema de la lluvia y el manejo de la pelota? ¿Cuál fue el planteo?

-Lo fuimos viendo en la semana. Si iba a estar así de lluvioso, teníamos que tratar de complicar al rival pateando la pelota y armando una buena pantalla de defensa, salir parejos. Creo que lo hicimos muy bien, todos concentrados en lo que teníamos que desplegar. Teníamos claro nuestro plan sabiendo que no había que pasar la pelota, sino avanzar metro a metro.

-Los forwards jugaron un partidazo.

-Era obvio que por el clima el partido iba a pasar por los forwards, no se iba a poder jugar muy largo. Sabíamos que Bulls iba a venir con todo porque están peleando la clasificación a los playoffs. Afrontábamos un desafío muy duro. Primero y principal, los ocho teníamos en mente el scrum, teníamos una gran deuda ahí. Los fuimos a buscar y la verdad es que nos fue muy bien. En ese sentido, estamos muy contentos. Y después estaba el maul. En la semana entrenamos mucho maul, defensivo y ofensivo, y creo que estuvimos muy bien, muy sólidos, marcamos dos tries. Estamos conformes.

-Considerando que matemáticamente ya no juegan por nada, ¿de qué les sirve esta victoria?

-Jugamos por el honor. Queremos terminar bien y llevarnos las tres victorias. Éste es nuestro piso, no hay que bajar los brazos. No hay que bajar de acá. Significa mucho para nosotros, para terminar bien la temporada y pensar en la próxima. Ahora viene Highlanders, que va a ser muy difícil.

-¿Cómo se hace para no conformarse cuando se vienen dos partidos todavía más difíciles?

-Hay que seguir laburando. Seguimos haciendo penales. A estos equipos no hay que darles de comer. Un penal son tres puntos o peor: la juegan o van al line-out y te pueden generar más puntos en contra. En la semana hay que corregir eso y no aflojar en la defensa. A veces te toca defender todo el tiempo para poder aprovechar cuando te toca agarrar la pelota. No hay que regalar nada.

-¿Cómo visualizás el próximo partido?

-No sé cómo están los Highlanders. Los vi el año pasado, cuando fueron campeones, y son muy peligrosos. Si está el clima bien, van a proponer mucho juego. Son muy dinámicos, son fuertes. Nosotros seguimos con la misma meta. No hay que relajarse ni un segundo y mejorar las cosas que hicimos mal, porque Highlanders, como todo equipo neozelandés, juega mucho con las manos. Será necesario estar muy concentrados.

Dpa