A medida que iban llegando los más de 400 invitados a la Finca Las Costas, en Salta, los medios estuvieron pendientes del arribo del futbolista de la Selección Nacional.

A bordo de una camioneta Renault Duster y acompañado por su mujer, la modelo Yanina Screpante, el "Pocho" para evitar las preguntas de la prensa pasó de largo y pisó a una periodista.

Más tarde sí se acercó a la prensa para que le saquen fotos y se trenzó con los movileros que le reclamaron por su "mala onda".

"Vos te pusiste adelante. Entiendo que estás haciendo tu trabajo, pero también tenés que entender que uno quiero entrar. Además yo no manejaba", le tiró a la periodista que pisó con el auto.

El delantero había avisado con un día de anticipación que no iba a realizar ninguna nota. Sin embargo, los periodistas intentaron conseguir alguna declaración suya cuando llegó a la celebración.

A bordo de un remis, Lavezzi quiso entrar al predio junto a su mujer Yanina Screpante. Pero al chofer se le complicó manejar en medio de tantos periodistas.

Y al parecer pisó con la rueda del vehículo a Sandra Borghi, la cronista de TN. "Está bien que no hables. Lo que está mal que entres como entraste, porque nos pisaste un pie a mí y a un montón de mis compañeros. Sabelo", le recriminó la periodista al futbolista.

"Escuchame, yo no manejo. Y si vos te ponés adelante... Estás haciendo tu trabajo, pero también tenés que entender que uno quiere entrar. ¿Por qué tengo la obligación de hablar si no tengo ganas?", contestó el Pocho, notablemente molesto con la situación.

Pero la explicación del delantero no alcanzó, y continuaron los reproches. "Mientras que pisabas a los colegas te reías, Pocho, en el auto", le dijo Sebastián Tempone, de América, cuando ya Lavezzi se estaba retirando hacia el festejo.

"¿Por qué pensás que me río? Me estaba riendo de la situación... No estoy acostumbrado a vivir esto", retrucó él. Y cerró: "Escuchame, yo juego al fútbol. No tengo que hablar de esto. De verdad...".