El matrimonio de Gerardo Zamora y Claudia Ledesma, que con doble comando administra Santiago del Estero, es el pasajero número doce de la mini-liga de gobernadores que floreció la semana pasada en medio del tironeo por Ganancias.

El grupo, surgido bajo el fuego de tensiones internas entre peronistas, intervino para frenar el proyecto que había votado Diputados y volverá a reunirse este martes antes de visitar a Rogelio Frigerio en la Casa Rosada.

Según supo Clarín, la tenida será temprano en el hotel Savoy -el mismo donde se reunieron la semana pasada- y en cierto modo será gestual: tratar de unificar una posición para llevar al encuentro con el gobierno y los demás mandatarios.

Entre los gobernadores la duda es una sola pero es mayúscula: cuánto les costará a las provincias el acuerdo que empezaron a coser Frigerio, Jorge Triacca y Mario Quintana con la CGT y que implica llevar a 27.941 y 37.000 los mínimos de Ganancias, para soltero y casado con dos hijos, respectivamente.

"No tenemos precisiones. Queremos saber cuál es el costo y ver como lo arregla la Nación" avisaron a Clarín ayer desde una provincia.

En Casa Rosada tampoco, hasta el atarceder, había un número oficial. Al mediodía, arriesgaban que la cifra podría estirarse a entre 38 mil y 40 mil millones, la mitad de lo cual lo "pagan" las provincias porque es recaudación que deja de llegar a los gobernadores y, en muchos casos, también afecta a los intendentes que reciben parte de la coparticipación.

El dato, para los que impulsaron la mini-liga, es esencial porque su argumento para frenar el proyecto que empujó la oposición en Diputados tuvo que ver con el costo fiscal de ese texto y, según su explicación, con el daño que produciría a las financias provinciales.

A lo largo del fin de semana, Juan Schiaretti (Córdoba), Juan Manuel Urtubey (Salta), Domingo Peppo (Chaco), Sergio Uñac (San Juan) y MIguel Lifschitz, de Santa Fe, estuvieron en contacto y extendieron las conversaciones a los demás integrantes de la mesa.

Otros tiempos. Macri con gobernadores en Olivos. Muchos le sacaron apoyo en el Congreso.

Eran, hasta el viernes, 11: con la incorporación de Santiago del Estero, llegan a la docena, exactamente la mitad de los gobernadores del país. El gobierno, al margen, anota sus cinco: María Eugenia Vidal (PBA), Horacio Rodríguez Larreta (Capital), Alfredo Cornejo (Mendoza), Gerardo Morales (Jujuy) y Ricardo Colombi (Corrientes).

Late otro planteo. Si, esta vez, el gobierno se tiene que estirar mucho más allá de los 28 mil millones comprometidos originalmente, quizá deba ser la Casa Rosada la que se haga cargo de parte de ese sobrecosto.

En definitiva, según creen los gobernadores, fueron ellos los que salvaron al gobierno de una derrota política en el Senado cuando intervinieron para que no se apruebe el dictamen de mayoría y tensaron, incluso, con la postura de Miguel Angel Pichetto.

Ayer, en Casa Rosada exponían como elemento político que tenían confirmaba la concurrencia de autoridades de 23 de las 24 provincias. Salvo Carlos Verna, de La Pampa, esperan a todos los demás aunque pueda haber representantes delegados como es el caso de Pablo González, que estaría en nombre de Alicia Kirchner.

Agencias