La baja del gasto público que se negaba a realizar Alfonso Prat-Gay será una de las tareas que deberá encarar el designado ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne.

El economista, de orígen radical y que formó parte de los equipos técnicos de la Fundación Pensar al igual que numerosos funcionarios del Gabinete, deberá trabajar -entre otros puntos- en la eficiencia del gasto público. En ese aspecto, según señalaron a Infobae fuentes de Gobierno, Dujovne trabajará de manera conjunta con los ministros Rogelio Frigerio (Interior),  Jorge Triaca (Trabajo), Andrés Ibarra (Modernización), Carolina Stanley (Desarrollo Social), Francisco Cabrera (Producción) y Luis Caputo (Finanzas). Un esquema que será supervisado por los vicejefes de Gabinete, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui.

El objetivo del presidente Mauricio Macri para esta nueva gestión económica es amplio: desde reducir el gasto público para bajar el déficit al 4,2 % del PBI en 2017 a lograr una mayor eficiencia en la administración pública, obtener unos 35.000 millones de dólares en el mercado financiero internacional y local para cubrir las necesidades de financiamiento de ese año y lograr un blanqueo exitoso.

"El gran temor es que el plan económico que aplique el nuevo ministro sea interpretado como un fuerte ajuste fiscal que repercutirá muy fuerte en la población", analizaron desde Casa Rosada.
Un gran interrogante es cómo quedará conformado el Ministerio de Hacienda que dirigirá Dujovne y, en particular, si se modificará la estructura que dirigió Prat-Gay.

Ayer presentaron la renuncia el viceministro Pedro Lacoste; el secretario de Hacienda, Gustavo Marconato; y el secretario de Legal y Técnica, Marcelo Griffi. Por otro lado, y como lo anunció ayer en conferencia de prensa el jefe de Gabinete, Marcos Peña, la Secretaría de Finanzas se transformará en un ministerio, que quedará a cargo del ascendido Luis Caputo (al parecer, hubo un pedido de Prat-Gay a éste para que se quedara). Así, con el desdoblamiento y el nuevo diseño del área,  se genera un Ministerio nuevo, un costo que el Gobierno tendrá que pagar.

Con respecto a la futura tarea de Dujovne, hay que destacar que el designado funcionario ha sido siempre muy crítico de la falta de reducción del déficit fiscal y sugiere un congelamiento del gasto público similar al que Michel Temer impuso en Brasil.

"Si el Gobierno lograra mantener el gasto congelado en términos reales por los próximos cinco años y la economía creciera 3% por año, el gasto en relación con el PBI bajaría de 45% a 39% en 2021. Y si esa estabilidad del gasto permaneciera por diez años, caería hasta 34% del PBI en 2026", escribió el economista en su última columna periodística publicada en el diario La Nación.
Por otro lado, y en paralelo a la modificación en la cartera de Economía, habrá otros cambios importantes como, por ejemplo, el pase del programa de viviendas ProCreAr desde la ANSES a cargo de Emilio Basavilbaso a la Secretaria de Vivienda, que depende del ministro Rogelio Frigerio.

Además, se unificarán todos los planes federales de vivienda en el Plan Nacional de Vivienda, pero no se reducirá el presupuesto. En este sentido, Dujovne se deberá encargar de eliminar, fusionar o mejorar diversos programas improductivos, superpuestos y de bajo impacto social, según confirmaron a Infobae fuentes cercanas al Gobierno.

Estos lineamientos son los que trazó Mauricio Macri como principales metas del 2017. A partir del 1 de enero próximo, los ministros deberán presentar al menos 10 iniciativas para reducir el gasto en sus respectivas áreas con el objetivo de mejorar la eficiencia en la administración.

También habrá modificaciones en los programas de formación laboral que están distribuidos en los ministerios de Desarrollo Social, Trabajo, Educación, Producción, Educación y en la ANSES. Dujovne, por orden de Macri, deberá unificar todos esos programas, y por ese motivo se creará la Agencia de Formación Laboral a través de un decreto que se publicará en el Boletín Oficial en los próximos días.

Imagen El vicejefe de Gabinete, Mario Quintana

Todos estos cambios van en la dirección de las órdenes impartidas por Mario Quintana hace tres semanas en el Centro Cultural Kirchner (CCK). En ese encuentro, que reunió a casi 600 funcionarios, pidió que "propongan alternativas para reducir gastos inservibles". "En la actualidad hay unos 200 programas en ejecución donde se puede mejorar la gestión de la administración con una restructuración del gasto unificando o fusionando esos programas", planteó el funcionario.

En ese aspecto, quién tendrá un papel más importante será la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, con la reestructuración de los programas y planes sociales.

El nuevo plan económico ya tiene a uno de sus ejecutores. Ahora habrá que ver cuándo y de qué forma se pondrá en marcha y si la reducción del gasto público será una las primeras medidas del nuevo ministro de Hacienda.

Agencias