El presidente Mauricio Macri inaugurará el próximo miércoles el 135° período de sesiones ordinarias del Congreso, en un escenario político complejo para Cambiemos que combina reclamos gremiales, sospechas de corrupción y el desafío de revalidar votos en las elecciones legislativas.

Con un clima de verdadera expectativa en torno a posibles anuncios, el jefe de Estado dará un discurso ante la Asamblea Legislativa por segunda vez desde su asunción, en la que será además su segunda cadena nacional.

Los detalles del mensaje presidencial quedarán reservados para la noche del martes, cuando Macri cenará con diputados y senadores oficialistas en Olivos, según pudo averiguar parlamentario.com.

La del miércoles será una ceremonia solemne, lejos de la estridencia y el cotillón que predominó en los años K. Se espera un discurso breve: sin ir más lejos, en un fuerte contraste con su antecesora, Cristina Kirchner, Macri habló el año pasado apenas una hora.

De acuerdo al cronograma oficial, los invitados fueron convocados para las 10.45. Además del Gabinete nacional, se espera la presencia de gobernadores, jueces y funcionarios, que aguardarán junto a los legisladores en el recinto de Diputados la llegada del presidente, prevista para las 11.15.

A pesar de que ningún oficialista se anima a arriesgar los posibles anuncios, el Gobierno ya dio algunas pistas de los temas con los que piensa ocupar al Congreso este año, como la Ley de Responsabilidad Fiscal, que deberá acordarse primero con las provincias.

Además, en Cambiemos no descartan que Macri informe sobre el envío del proyecto de reforma del Régimen Penal Juvenil, que incluye la baja de edad de imputabilidad. El debate de la iniciativa fue encomendado a ocho mesas de trabajo que, según supo este medio, tienen previsto terminar su trabajo antes de fin de mes, para que el Ministerio de Justicia redacte el texto final.

Además de los anuncios, el Parlamento tiene pendientes desde el año pasado importantes proyectos, como el de extinción de dominio para recuperar bienes provenientes del delito; la ley de Cannabis medicinal; la regulación de la pauta oficial; y la reforma del mercado de capitales, entre otros temas.

Macri llega a la Asamblea Legislativa en pleno conflicto docente, luego de que los gremios anunciaran un paro de 48 horas que dilatará el inicio de clases, en reclamo por la apertura de paritarias a nivel nacional. Por si fuera poco, la CGT prepara una multitudinaria movilización para el 7 de marzo, con la adhesión de las dos CTA, organizaciones sociales y partidos políticos. El motivo principal: la nueva ola de despidos que sacude, sobre todo, al sector industrial.

Además del frente gremial, el presidente deberá enfrentar este año el desafío electoral, con la renovación de la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado. Cambiemos buscará mantener y acrecentar su representación, pero sabe que, aún en el mejor escenario, Macri deberá gobernar hasta el último día con minoría parlamentaria.

Además, el Gobierno viene de atravesar días críticos por dos escándalos que ocuparon las primeras planas: el acuerdo con el Correo, donde está involucrada la familia Macri, y el polémico cambio en la fórmula de la movilidad jubilatoria.