Varias denuncias presentadas en la Justicia sostienen que el ex jefe del Ejército del kirchnerismo, el general Cèsa Milani tenía montada una red de espionaje paralela a la oficial, dedicada a vigilar a opositores políticos y periodistas.

A pesar de que la Justicia no encontró indicios de su existencia, una conversación telefónica interceptada por el fiscal Alberto Nisman en su denuncia contra Cristina Kirchner reafirma esta idea.

Se trata de una escucha que ordenó Nisman y que registró una conversación entre un integrante de la comunidad iraní y un supuesto agente de inteligencia. Es uno de los más de 40.000 audios que relevó un equipo de LN Data.

Se trata de una comunicación que mantuvieron el 2 de junio de 2013 Allan Bogado, agente inorgánico de inteligencia, y Jorge Alejandro "Youssuf" Khalil, presunto enlace de la comunidad iraní en Buenos Aires con el kirchnerismo, con la embajada y el gobierno de Irán, y con el piquetero Luis D'Elía .

En esa conversación, Allan Bogado afirma que Milani manejaba "una inteligencia paralela".

La charla se registró poco después de que la ex presidenta Cristina Kirchner decidió sacar a Nilda Garré del Ministerio de Seguridad.

Garré había mantenido un perfil bajo en su función. En primera plana había aparecido su segundo, el secretario de Seguridad Sergio Berni , quien se había mostrado activo hasta el punto de que se transformó en un superfuncionario que en moto, en helicóptero o en avión llegaba para ponerse al frente en operativos policiales o de fuerzas de seguridad. Incluida su aparición en el departamento de Puerto Madero donde fue hallado muerto el fiscal Nisman tras presentar esta denuncia.

Allan Bogado habla de la salida de Garré y el rol de "el Loco", como apoda a Berni en esa conversación, que Nisman seleccionó para sustentar su denuncia contra Cristina Kirchner, acusada de encubrir a Irán en el ataque a la AMIA.

Las conversaciones que se registraron en esta investigación mencionan situaciones que en algunos casos pudieron ser verificadas -como el intento de negociar petróleo por granos, que reveló LA NACION hace un mes. Pero otras cuestiones no pudieron ser corroboradas.

También habla de la supuesta relación que tenían Fernando Pocino, director de Interior de la ex SIDE en 2013, y la hija de Garré. Pocino era agente de confianza de Cristina Kirchner. Estaba enfrentado con el sector de la SIDE que comandaba Jaime Stiuso. Fue gracias a Pocino que Milani conoció a Garré.

No por nada Stiuso dijo en su entrevista con LA NACION del año pasado que existía un mecanismo de inteligencia paralelo al oficial, que manejaba Milani.

La Justicia investiga esta posibilidad en dos causas judiciales, pero en ninguna de ellas logró avances como para determinar si es cierta la existencia de esta red de espías.

La conversación que mantuvieron Khalil y Bogado sobre Milani fue registrada el 2 de junio de 2013 desde el número telefónico 11-3238-4699 y está guardada en el archivo B-1009- 2013-06-02-221245-20, del CD 44, de las pruebas de la denuncia de Nisman contra Cristina Kirchner.

El diálogo es el siguiente

Khalil: -Dos cositas... ¿Cómo ves el cambio que hubo en el gobierno? La ida de la mujer [por Nilda Garré].

Bogado: -No hubo cambios.

Khalil: -¿Cómo no? ¿No sacaron a los ministros?

Bogado: -Pero hubo cambio de nombres, no de situación.

Khalil: -No, no, pero el cambio de nombres, especialmente el de la mina, ¿cómo lo ves?

Bogado: -Y... para nosotros, adentro... donde yo trabajo, es complicado. Para ellos, donde están, es lo mismo, el que estaba laburando era "el Loco"[por Berni]...

Khalil: -Ah, OK... Mañana quiero una charla con vos en algún momento.

Bogado: -Sí, sí. Yo te lo digo claro, el director de Interior nuestro [Pocino] estaba porque es el novio de la hija de la señora que se fue...

Khalil: -Sí, pero ¿vos crees que la sacaron a la que se fue? Te pregunto eso concretamente...

Bogado: -Ah, porque ahora viene todo un tema interno. Ella estaba con su amigo Milani, que tiene una inteligencia paralela... eh... por un tema de la Policía Aeroportuaria que ahora va a saltar. Mirá Lanata hoy, cómo hacen para sacar la plata y nadie mira nada en la frontera.

La conversación se registró un año antes de que se judicializaran las sospechas sobre Milani y seis meses antes de que un juez allanara el Edificio Libertad y hurgara en sus servidores sin éxito para probar que el ahora preso general se dedicaba al espionaje paralelo.