Ambos presidentes cumplieron a rajatabla con sus roles y obtuvieron lo que esperaban. La comunicación entre ambos tuvo incluso momentos de coincidencias muy fuertes, en temas de multilateralismo y medioambiente de los que se viene apartado el estadounidense Donald Trump. Pero sólo un chiste de Mauricio Macri sobre la final del último Mundial de Fútbol en el que la selección de Argentina perdió frente a la de Alemania, arrancó una sonrisa a la circunspecta Angela Merkel, que le dio todo su apoyo al Presidente.

Merkel apoyó desde el vamos. Primero con su visita, la primera a la Argentina pese a que gobierna desde 2005 y ya estuvo antes siete veces en Latinoamérica. Después en su declaración de ayer a la prensa en la que tras enumerar una serie de coincidencias temáticas con su anfitrión, afirmó que su país apoyaba las negociaciones entre el Mercosur y la Unión Europea para alcanzar un acuerdo de libre comercio, y el deseo del Gobierno de que Argentina sea miembro de la Organización para el Desarrollo y la Cooperación Económicos (OCDE). Pero sobre todo, Merkel, que conoció al líder del PRO a fines de 2014, respondió una pregunta a la prensa en la Casa Rosada en la que sentenció que “con el Gobierno de Macri las condiciones macro (de la Argentina) se habían vuelto más fiables no sólo para las grandes empresas sino también las pequeñas y medianas” que son de hecho un motor de la economía alemana.

La jefa del ejecutivo germano, que llegó a las 7 de la mañana de ayer sólo con el viceministro de Economía y Energía Uwe Beckmeyer pero con una comitiva de diez CEOs de empresas, opinó que con la actual administración en la Argentina había “más transparencia” y “menos trabas burocráticas, y una cooperación más “estrecha”. Macri le agradeció que haya venido al país acompañada por una comitiva de importantes empresas. "Algunas ya están acá y ratifican con inversiones su presencia a futuro y otras están llegando. Espero que participen en las licitaciones de transporte que vamos a hacer, de infraestructura en general, de energías, de salud, en desarrollo de tecnología. Son todas cosas en las que hay un enorme potencial", indicó.

Justamente los empresarios hablaron al rato de las licitaciones en danza que se vienen en la Argentina para los planes de infraestructura que tiene Cambiemos. Los alemanes le pidieron al Presidente que a la hora de licitarse obras se tome también en cuenta la calidad y no sólo el precio. Fue un mensaje casi explícito ante el abrazo que le han dado los argentinos al capital chino. En las reuniones Macri Merkel participó el núcleo chico del presidente. Y en el mano a mano empresario estuvieron los ministros de Hacienda Nicolás Dujovne y de Finanzas Luis Caputo.

Por cierto, lo primero que hizo la canciller ayer fue escuchar de primera mano las necesidades del empresariado franco argentino en un desayuno que se hizo en el hotel Alvear donde se alojó anoche. En la Rosada dijo que con Macri habló de energía "eólica, solar, hidráulica, y Alemania puede aportar mucha experiencia en este ámbito", subrayó.

Cuando en la conferencia de prensa, los dos mandatarios subrayaron una clara preferencia por el multilateralismo y el apoyo al Acuerdo de París, diferenciándose de Trump, entraron en un contrapunto sobre el acuerdo Mercosur UE. Ante una pregunta sobre la crisis en Brasil, Macri diijo que este bloque estaba completamente alineado y que más dificil sería cambiar las posturas proteccionistas de algunos europeos. A ello Merkel respondió con sagacidad y dijo que todas las partes "tendrán que hacer concesiones".

Antes de rumbear hacia la Rosada dejó una ofrenda floral en la Plaza San Martín, con el jefe del ejecutivo porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el canciller designado Jorge Faurie.

Pero en el medio de la cita presidencial, la canciller, que salió de su país en plena campaña electoral en la que busca se reelecta por tercera vez en septiembre, se tomó su tiempo para dar algunas señales de contacto social con la Argentina. Una de ellas fue la visita al templo judío de la calle Libertad, donde acompañada por los presidentes de las principales instituciones judías, y el rabino del templo Sergio Bergman -también ministro de medio ambiente- inauguró un antiguo órgano Walcker que se reparó con fondos alemanes. 

Merkel estuvo ayer custodiada por un fuerte operativo que se montó con avanzadas anteriores a su viaje, que termina este viernes muy temprano con su partida a México. Sin la seguridad tuvo un aspecto casi quirúrgico, e incluyó francotiradores, aeronaves y barcos sobre el Río de la Plata, sobre todo cuando Merkel visitó el Parque de la Memoria para homenajear a los desaparecidos de la dictadura. Por la noche fue recibida por Macri en la cena de gala en el CCK y después durmió en el Alvear.

Imagen Portada:Canciller alemana Angela Merkel y presidente Mauricio Macri / Foto Presidencia de la naiòn
Con informaciòn de Agencias Tèlam-DyN y prensa Presidencia de la Naciòn