Sábado 4 de Mayo de 2024

Hoy es Sábado 4 de Mayo de 2024 y son las 23:58 -

16.4°

SALTA

CINE

25 de septiembre de 2017

Un barco en la montaña

La increíble historia del rodaje del filme de Werner Herzog, de tres años de duración, cumple 35 años

CÓMO SE HIZO - “FITZCARRALDO”:El espíritu de “Fitzcarraldo”, la mítica cinta en la que Klaus Kinski es un empresario que quiere construir un teatro de ópera en la selva amazónica de Perú, continúa vivo a 35 años del estreno del filme y el mismo tiempo desde la aparición de “Burden of dreams”, el documental aparecido en septiembre de 1982 y que rescata el imposible rodaje que eligió el director de la obra maestra, Werner Herzog, que incluye la memorable tarea de mover un barco de 320 toneladas por encima de una colina.

Después de rodar en la Amazonia peruana “Aguirre, la ira de Dios” (1972), Herzog regresó a Iquitos en 1979 para filmar la historia del comerciante cauchero peruano Carlos Fermín Fitzcarrald, que en su afán por volver más rentable su negocio se propuso el descabellado plan de subir un barco de 300 toneladas de peso por la ladera de una montaña.

Y para rodarlo, Herzog no echó mano a trucos de cámara o efectos especiales, sino que decidió realizar el descabellado plan él mismo: el cineasta creía que nadie había realizado semejante proeza para filmar una película, y se enfrentó con las fuerzas de la naturaleza contra las que trabajó el protagonista de su filme llamándose “conquistador de lo inútil” con orgullo.

El acto de subir el barco (fueron tres, en realidad, utilizados en diferentes escenas) por la montaña causó lesiones en varios miembros del rodaje, y años después Herzog sería incluso acusado de explotar a los pueblos originarios de la zona, con algunos incluso comparando a Herzog con el barón del caucho que retrataba. Herzog estuvo inicialmente en buenos términos con los aguarana de la zona (algunos fueron incluso contratados como extras en el filme) pero cuando Herzog decidió construir una pequeña aldea sin consultar al consejo en territorio aguarana, las relaciones se deterioraron: Herzog buscó protección de la milicia local y en diciembre de 1979, los aguarana quemaron el set del filme.

“Fiztcarraldo es una película que se hace una vez en la vida y tenía que acabar el rodaje porque en caso contrario hubiera sido el fin de mi carrera cinematográfica” asegura Walter Saxer, productor del filme, desde un pequeño oasis de selva en el distrito de Punchana, en Iquitos, donde se encuentra el hotel “La Casa Fitzcarraldo”, donde se inició la producción de la película y donde se alojaron los protagonistas, entre ellos el cantante de los Rolling Stones, Mick Jagger, y la actriz italiana Claudia Cardinale.

Saxer trabajó en cinco películas con Herzog, pero recuerda particularmente la accidentada filmación de “Fitzcarraldo”, las dificultades del rodaje en plena selva, el cambio de localización debido al incendio del campamento en el que estaban alojados los indígenas que transportaron el barco por encima de la montaña, y la renuncia del protagonista Jason Robards (dos veces ganador del Oscar).

La idea original era que el protagonista fuera Jack Nicholson, pero pidió “5 millones de dólares” y se decidieron por Robards, quien abandonó la película después de enfermar cuando ya se había filmado casi la mitad de la cinta, por lo que fue reemplazado por Klaus Kinski.

Debido a este retraso en la producción, Jagger, que había rodado durante tres meses junto a Robards, tuvo que dejar la película porque tenía una gira por América con los Rolling Stones y el director optó por eliminar su personaje. Saxer recuerda que Jagger fue “muy simpático” y “sencillo” y que le gustaba mucho estar en Iquitos “porque nadie lo conocía”.

La irrupción de Kinski en el rodaje fue mayor a la de cualquier fuerza de la naturaleza que enfrentaran: el virulento actor se peleó constantemente con Herzog y otros miembros del equipo, por motivos aparentemente triviales como la calidad de la comida (un proceso relatado no solo en “Burden of Dreams” sino también en “Mi mejor amigo”, documental de Herzog sobre Kinski). Aunque para Herzog el comportamiento del actor perturbó notablemente a los locales (incluso, el cineasta cuenta que uno de los jefes se ofreció a matarlo: el alemán se negó porque faltaba completar la película), Kinski dijo sentirse cercano a ellos. Herzog intentó manipular estas tensiones crecientes en el set de rodaje, aunque todo estuvo muy cerca de salirse de sus manos.

Saxer cuenta otro relato, sin embargo: asegura que el trato con Kinski “no era tan complicado” y que no solo hizo la interpretación sino que hizo la película, ya que Herzog “ no tenía ni voz ni voto” y no podía ni “tratar de dirigir a Kinski”.

Para el rodaje de la película, Saxer explica que compraron un barco original de 1911 construido en Escocia y que se hundió en los años 50 en Leticia (Colombia), y lo reflotaron y lo llevaron a Iquitos.

Este barco, que en la película fue bautizado como “Molly Aida”, sirvió de modelo para construir otros dos mas que también fueron utilizado en el rodaje que se desarrolló además de en Iquitos, en los ríos Urubamba y Camisea, en el Pongo de Mainique, en el departamento de Cuzco, y en Manaos (Brasil), respectivamente.

Todos los barcos se vendieron al término de la película, que se estrenó en 1982, porque se quedaron sin dinero al final del rodaje ya que fue una producción muy cara que costó 6 millones de dólares.

Al rememorar la hazaña que supuso subir el barco por la ladera de una montaña, Saxer dice que “nadie sabía cómo hacerlo”, y que en un inicio contrataron a un ingeniero brasileño que se marchó porque creyó que era imposible conseguirlo.

Finalmente él junto a un equipo de diez peruanos idearon la manera de subir el barco con un tractor de 36 toneladas y con la ayuda de 600 indígenas asháninkas, que eran “gente muy linda que no habían visto una película, no conocían el dinero y muchos no hablaban castellano”.

“Fiztcarraldo es una película que se hace una vez en la vida y tenía que acabar el rodaje porque en caso contrario hubiera sido el fin de mi carrera cinematográfica”



COMPARTIR:

Comentarios

Escribir un comentario »

Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!