Para el exministro de Educación porteño Mariano Narodowski las nuevas medidas tomadas en la provincia de Buenos Aires no reducirán "la brecha" entre la caída de la matrícula en las escuelas públicas en el Conurbano (la zona más densamente poblada) y el aumento en las privadas.
 
Según cuenta el especialista en política educativa y exfuncionario macrista, desde 2003, año de ascenso del kirchnerismo al poder, las escuelas primarias públicas del Gran Buenos Aires perdieron el 11% de sus alumnos, entre desertores y los que se fueron a escuelas privadas que engrosaron su matrícula en un 37% en la última década. 
 
Narodowski se pregunta en una columna de opinión publicada este jueves en Infobae.com si las nuevas medidas tomadas por el gobierno bonaerense que cambian el esquema de calificaciones en las escuelas lograrán reducir este declive de la escuela pública
 
"Después de una década de esta política educativa, la respuesta es negativa", se responde y considera que desde "hace años que el pensamiento políticamente correcto domina la educación argentina y consiste en ablandar la exigencia pedagógica y disimular la calidad bajo una máscara de inclusión educativa que no incluye a los más pobres y que manda a los sectores medios a la escuela privada". 
 
Para Narodowski, "estas medidas son ineficaces porque no logran calidad ni tampoco inclusión". 
 
Para el exministro porteño, las políticas apuntan a esconder la realidad más que a solucionar los déficits. "La idea que prevalece desde 2003 es que informar los problemas del aprendizaje, especialmente cuando están asociados a las paupérrimas condiciones de vida de un sector creciente de la población, es estigmatizar", sostuvo. 
 
"Esta anestésica idea de que lo que estigmatiza no es la realidad sino el informar sobre la realidad ya está en la Ley de Educación Nacional, aprobada por amplia mayoría en 2006 que en su artículo 97 dice –textualmente- que "la política de difusión de la información sobre los resultados de las evaluaciones resguardará la identidad de los/as alumnos/as, docentes e instituciones educativas, a fin de evitar cualquier forma de estigmatización"", dijo. 
 
"O sea, el problema no es que se iguale para abajo: para esta política educativa el problema es que se lo comunique", resumió.