Los salteños renovaron ayer su pacto de fe con el Señor y la Virgen del Milagro, en la celebración religiosa más importante para la provincia vecina. Desde las primeras horas de la tarde, haciendo caso omiso al calor, los fieles habían comenzado a congregarse alrededor de la Plaza 9 de Julio, para encabezar la procesión en honor a los patronos de la Provincia. 

Una fiesta milenaria
Miles de personas llegaron a la provincia vecina desde distintos puntos de la Argentina y también de países limítrofes para participar de la procesión en honor a la Virgen y el Señor del Milagro, que se celebra desde 1692 y que es una de las más convocantes del norte. Por estos días, la capacidad hotelera de Salta estuvo colmada.

Como todos los años, la muestra de fe de los salteños de toda la Provincia para con sus patronos se puso de manifiesto desde muy temprano, con coloridos misachicos que le dieron color a esta fiesta cuya convocatoria se calculó en 800.000 personas, según la Policía provincial. Pasadas las 15, peregrinos de todos los rincones de la provincia comenzaron a llegar a pie, en bicicleta y hasta en sillas de ruedas, para participar de esta fiesta multitudinaria. 

Las imágenes de la Virgen y del Señor del Milagro peregrinaron por las calles de la ciudad, mientras eran saludadas por miles de pañuelos blancos. Los fieles acompañaron las imágenes de Cristo y de la Virgen del Milagro hasta el Monumento 20 de Febrero, lugar en el que se montó un palco desde el cual el arzobispo de Salta, monseñor Mario Cargnello, celebró la renovación del Pacto de Fidelidad con sus patronos y apeló ante los miles de fieles a no resignar la educación religiosa. 

La educación religiosa
“No teman a la educación religiosa”, dijo. “Para la iglesia la educación religiosa no es una cuestión de proselitismo, solo pretende servir a la humanización de la educación, No pretende convertirlo en un ser crédulo, sino en un ser libre, queremos crear una clara conciencia de ciudadanía”, finalizó el jefe de la Iglesia local. Tras el mensaje de Monseñor Cargnello, la procesión comenzó su tramo final, con miles de fieles que acompañaron las imágenes de Jesús y la Virgen del Milagro en su regreso a la Catedral, y allí quedaron guardadas hasta el año próximo.