El gobierno hizo público un documento de 89 páginas en el que se resumen las principales metas del presupuesto nacional para 2019. Según el borrador surgido del Ministerio de Hacienda, el Gobierno pronostica un crecimiento del PBI de un 2% mientras que no fija un precio para el dólar, del que, se apunta, flotará “libremente en el mercado”.

También se prevé un aumento de las exportaciones en relación a las importaciones a modo de equilibrar el preocupante déficit comercial que acumula el gobierno del presidente Mauricio Macri.

En el borrador del Presupuesto 2019 se indica que para 2018 habrá un crecimiento del PBI de “alrededor del 1%”, pero para el año próximo se prevé una expansión de “alrededor del 2%”, gracias a “los mejores pronósticos para la cosecha de trigo y el rebote de la cosecha de soja”, y a una esperada “normalización de los mercados financieros”.

También estiman un crecimiento de las exportaciones del 10%. El Gobierno quiere que la inversión y las exportaciones sean “los componentes de la demanda que lideren el crecimiento”. Dice el borrador: “Esperamos que la expansión de la economía sea liderada por las exportaciones (10,7%) impulsadas en buena medida por la reversión de la sequía y un mayor crecimiento de los socios comerciales”.

El documento plantea un crecimiento para las importaciones del 7%, “principalmente como respuesta a la necesidad de incorporar bienes de capital”.

Se agrega que “el 77% de las importaciones de 2017 estuvieron ligadas a la producción”.

En referencia al gasto del Estado en sus actividades corrientes, “se proyecta una contracción del consumo público (-3,7%), en línea con el cumplimiento de las metas fiscales para el año”.

“La inversión fue el motor del crecimiento de la economía desde mediados de 2016 hasta hoy”, dice el borrador. En 2017, la inversión creció un 10%, y en el primer trimestre de este año un 18% interanual. Para el Presupuesto 2019, “se proyecta que un crecimiento de 5,9% de la inversión”.

El dato más llamativo es la  inflación. “Para 2018, la inflación se ubicará en tomo a 27%, 2 puntos porcentuales superior a la observada el año pasado”, sostiene el documento. “La política monetaria continúa focalizada en bajar la inflación”, se afirma. Y, “en línea con las expectativas actuales del mercado”, se fija una inflación “del 17% para 2019, y del 13% y el 9% para los siguientes dos años”.

“No habrá más financiamiento del déficit fiscal con emisión monetaria”, sentencia el borrador. “La política de financiamiento se delineará con el fin de cubrir las necesidades del Sector Público, las que incluyen un déficit primario del orden del 1,3% del PBI”, se puntualiza, en sintonía con lo acordado con el Fondo Monetario.

El documento dado a conocer ayer, y que funcionará como un borrador con el que el Gobierno nacional iniciará las conversaciones con las provincias y con las fuerzas opositoras en el Congreso, también señala que para el año próximo “habrá inversiones a través del sistema Participación Público-Privada (PPP) por más de 16.000 millones de pesos, orientadas al transporte y distribución de gas natural y a la eficiencia energética”, mientras que para “la demanda de inversión del período 2019-2021, se analizaron 5.391 proyectos de todas las jurisdicciones, por un monto total de casi $678.282 millones para el ejercicio 2019”.

“Se privilegiarán las inversiones que impliquen la conclusión de obras en ejecución, en particular aquellas que contribuyan a una mejora de la competitividad de la economía, y la continuidad de políticas encuadradas en los principales objetivos de Gobierno”.

“En cuanto a los servicios de la deuda en 2019, se estima que cerca del 43% estarán constituidos por obligaciones con organismos públicos nacionales que, en su gran mayoría, se asume tendrán los recursos necesarios y la autorización correspondiente para refinanciarlos”, dice el borrador.