El macrismo porteño con Horacio Rodríguez Larreta a la cabeza tuvo dos motivos de festejo en los últimos 5 días: el debate porteño en el que se lo vio mayoritariamente ganador y, por el contrario, todavía muy novato a su principal contrincante, Matías Lammens.

Además, el más inesperado y el más celebrado: la decisión de Alberto Fernández de reducir los fondos nacionales para la Ciudad de Buenos Aires. Esta información provocó ruidos hacia adentro del peronismo y en las cercanías de Matías Lammens varios llamados con pedidos de aclaración.
Alberto Fernández relativizó lo dicho, al afirmar que no se refería a la coparticipación, pero no desmintió que piensa revisar los aportes nacionales a la Ciudad, sobre todo para obras, como hizo Cristina Kirchner con Macri durante sus dos gobiernos. En el PJ porteño lamentan que traiga ese recuerdo a los electores porteños.¿Por qué lo hizo?
Alberto Fernández ya está más enfocado en el 10 de diciembre que en el 27 de octubre. Para después del 10 de diciembre, ha decidido recostarse en los gobernadores en la construcción de sus equilibrios internos y esto fortalece esa construcción. Busca reafirmar su declamado perfil federal. "Voy a ser el menos porteño de los presidentes". También es una forma de diferenciarse de Macri.
También tendrá que hacer frente a la demanda de Kicillof y de La Cámpora por más fondos para la Provincia de Buenos Aires y no puede sacárselos a las demás provincias, en cuyos gobernadores se apoya. Después de las PASO y del debate el peronismo empieza a asumir que CABA está virtualmente perdida, aunque públicamente lo niega y ayer le envió al equipo de Lammens dos encuestas que dan a Rodríguez Larreta por debajo del 50 por ciento, que necesita superar para evitar un ballottage.
Sin embargo, si se toman solo los votos positivos, que son los que se cuentan en la elección general, en las PASO Larreta superó el 50% y lo ocurrido con posterioridad no parece haberlo dañado, sino todo lo contrario, especialmente por lo ocurrido en el debate del jueves pasado.
Por último, pero no menos importante, el jefe de gobierno porteño representa el ala más política y menos antiperonista del macrismo, que es preferida por Alberto para encabezar la oposición. Con Larreta tendría la posibilidad de encontrar un espacio para la cooperación, a diferencia de lo que ocurriría un liderazgo absoluto de Mauricio Macri.
¿Cómo haría el recorte? Fernández tiene dos vías para recortarle fondos a la Ciudad de Buenos Aires: podría anular el decreto de Macri de 2016, vinculado con el traspaso de gastos a la Ciudad, como la policía, que elevó el porcentaje de coparticipación que corresponde a CABA del 1,4 al 3,75. Sin embargo, obviamente la Ciudad apelaría. De todas maneras, Fernández aclaró después de trascender su intención de recortar fondos que no está pensando en esta vía.
O bien, podría retrotraer la situación a antes del 10 de diciembre de 2015 y no aportar fondos para obras en la Ciudad como hizo Cristina Kirchner durante sus dos mandatos. Durante la presidencia de Macri, la Nación financió la cuarta parte de las obras públicas de CABA. Previsor Rodríguez Larreta, ya presupuestó obras sin aporte de la Nación.
Como Alberto Fernández en la Ciudad, el jefe de gobierno ya da por sentado que en la Nación triunfarán sus adversarios. Realismo político extremo a pesar de Macri y Lammens.