Los vecinos del centro de Barcelona se han encarado este jueves por la noche a los manifestantes antifascistas que pretendían encender una hoguera con contenedores colocados como una barricada. Esto ha sucedido en el cruce de la calle Balmes con la calle Rosselló.

Después de tres noches de altercados y fuegos por toda Barcelona, algunos vecinos han salido a la calle para protestar contra la quema de los contenedores y otro mobiliario. Este jueves, un grupo de protestantes contra la sentencia del ‘procés’ se han enfrentado a todos aquellos vecinos que intentaban evitar las llamas. Los vecinos les han pedido que no quemaran más contenedores y se han puesto delante de ellos criticando que llevan dos noches viendo incendios y que lamentan la situación que está sucediendo en la ciudad.
Cuando los antifascistas han encendido un contenedor pequeño de un comercio y posteriormente un contenedor grande, los vecinos han tirado al suelo lo que había dentro del contenedor para apagar el fuego. Algunos manifestantes se han enfrentado a ellos y han insistido en quemarlos. “Ni independencia ni nada, esto es un golpe de Estado”, ha sentenciado uno de ellos. Los vecinos gritaban “esto no lo vais a hacer delante de mí” y “así no se hacen las cosas” con el objetivo de ahuyentar a los manifestantes.

En ese momento, más residentes han salido a sus ventanas y balcones y han iniciado una cacerolada para unirse a la protesta de esos vecinos que han bajado a la calle. Otros protestantes han ayudado a dispersar el grupo y han llamado a irse del lugar al ver que los vecinos no iban a permitir más llamas. Al descender por la calle Balmes, han iniciado otra hoguera.

La tercera noche consecutiva de altercados en el centro de Barcelona se ha saldado, hasta las 23.30 horas, con nueve personas heridas. El Sistema de Emergencias Médicas (SEM) de Cataluña ha informado de que entre los heridos se encuentra un joven manifestante independentista que ha recibido una paliza por parte de un grupo de extrema derecha en la calle Balmés con Rosselló.

Esta nueva jornada de disturbios, con una menor presencia policial, ha estado marcada por nuevos actos vandálicos, el incendio de una tienda de ropa en Rambla de Catalunya y las agresiones de grupos de ultraderecha a los CDR y los independentistas.