El kirchnerismo impuso su mayoría y aprobó en el Senado el pliego de Alejandro Vanoli como presidente del Banco Central.

Con 37 votos a favor y 24 en contra, el oficialismo votó casi en soledad ante el rechazo general de la oposición.

La defensa de Vanoli corrió por cuenta del oficialista Rodolfo Urtubey, quien defendió su larguísima trayectoria en la función pública” y elogió que el funcionario se expresara en contra de “una devaluación que pueda destruir el poder adquisitivo de los argentinos”.

En forma casi monolítica, la oposición rechazó el pliego por cuestionar los antecedentes de Vanoli en la Comisión Nacional de Valores.

En la sesión de hoy, el Senado también le dio su acuerdo a la designación del nuevo director de esa entidad, Pedro Martín Biscay.

Vanoli llegó al Banco Central el 1 de octubre para reemplazar a Juan Carlos Fábrega.

Su arribo a la entidad monetaria implicó un notorio cambio de estrategia. Mientras Fábrega parecía propiciar un deslizamiento suave del dólar –tras una devaluación de mayor peso en enero- y cierta flexibilidad para las operaciones cambiarias a través de la bolsa –el contado on liqui y el dólar MEP-, desde la llegada de Vanoli se reforzaron las inspecciones, multas e incluso refuerzo de las normativas para achicar todo lo posible ese tipo de operaciones.

Al menos momentáneamente, el ex CNV tuvo un éxito aunque sea parcial: consiguió que el blue y el contado con liqui bajaran a entre 12 y poco más de 13 pesos desde los entre 15 y 16 que habían alcanzado al final de la era Fábrega, aunque los operadores aseguran que las presiones al alza continúan.