Desde este mes el haber mínimo para jubilados será de $22.071, lo mismo ocurrirá en mayo, mientras que, desde junio, se activará la fórmula de movilidad que definirá el aumento de todos los haberes y prestaciones de Anses para el siguiente trimestre.

Esto responde a que durante abril y mayo, la Anses paga un bono de $1.500 cada mes, que se suma al incremento que ya tuvieron jubilados y pensionados en marzo, cuando se activó la fórmula de movilidad (+8,07%).

El próximo incremento debía darse en junio, por la misma fórmula, y en parte tendría en cuenta el aumento de las arcas del organismo (vía impuestos específicos, como el IVA) y, en parte, la evolución de los salarios de los trabajadores en activo. No obstante, para evitar que los jubilados y pensionados que cobran menos de $30.856 pierdan poder adquisitivo frente al aumento de los precios en general, se dispuso el pago de este bono.

El bono solo alcanza a los jubilados con ingresos inferiores a $30.856 (70% de las personas del régimen general), y con este aporte extraordinario, durante abril y mayo, los jubilados cobrarán un máximo de $32.356.

Para conocer cuánto se cobrará este mes y el próximo, cada jubilado puede consultar su último bono de sueldo, y sumarle al salario de marzo $1.500.

En tanto que, en junio se activará nuevamente la fórmula de movilidad, con la que además de las jubilaciones y pensiones, se actualizarán todas las prestaciones de Anses, incluyendo AUH.

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Jubilaciones por encima de los $22.000 desde junio

De un Informe de la Fundación Mediterránea titulado “Jubilaciones y movilidad: Resultados para 2020 y escenarios 2021” (presidida por María Pía Astori), se desprenden distintas posibilidades con la nueva fórmula. Así, se pueden prever los incrementos de junio, según qué suceda con la economía del país (las estimaciones se realizaron a principios de año, con motivo de la presentación de la nueva fórmula).

• Escenario 1 - Inflación moderada con leve recuperación de la actividad: el IPC alcanza 34,5% en un año, los salarios se incrementan en el orden de 36,1%, y la recaudación finaliza el año con un incremento del 37,3%. Bajo este esquema, sobre el salario de junio habría que sumar un incremento del 7,2% ($22.052,11).
• Escenario 2- Inflación alta con leve recuperación actividad: el índice de precios cierra el año en 51,1%; los salarios se incrementan en 52,9%; y la recaudación alcanza 53,5%. En este caso los aumentos trimestrales restantes serían de 9,2%; 10,1% y 7,2%. Así, el salario en junio pasaría a 22.463,532 (+9,2%).
• Escenario 3 – Inflación alta con devaluación del peso y recesión: Aquí los salarios y la recaudación van por debajo de la inflación en los meses de inflación más alta (inflación: 58,5%; salarios: 50,8%; recaudación: 55,7%). El aumento que había estimado Mediterránea en este escenario para marzo (8,3%), fue el más acertado; y para junio habían calculado un 7,9%, que dejaría el salario mínimo en $22.196,10.