El Gran Premio de la Emilia Romaña, en el mítico circuito de Imola, fue escenario de la segunda fecha del campeonato mundial de Fórmula 1. Bajo una lluvia tenue pero persistente que complicó a los vehículos, Max Verstappen (Red Bull) se llevó la victoria, escoltado por Lewis Hamilton (Mercedes) y Lando Norris (Mercedes).

Verstappen (Red Bull), con una estupenda largada metiéndose por adentro en las primeras curvas, le robó la punta de la carrera a Hamilton (Mercedes), que en la largada fue palmo a palmo con Sergio Checo Pérez (Red Bull), con un mínimo roce incluido, y quedó tercero.

De todos modos, el británico recuperó el segundo lugar en detrimento del mexicano, que cayó a la cuarta colocación al ser superado por Charles Leclerc (Ferrari).

Ya en la segunda vuelta debió entrar el auto de seguridad luego de un toque entre Mazepin y Latifi terminó con este último fuera de pista y golpeando un paredón. Más allá de la rotura del frente de su Williams, el piloto -que quedó afuera- no sufrió ningún daño.

A partir de la reanudación, y sobre todo luego de que empezara a ceder la lluvia (aunque se mantienen los amenazantes nubarrones y el pronóstico indica que volvería a caer agua), Hamilton se empezó a acercar y llegando a la vigésima vuelta se colocó entre 4,9 y 5,4 segundos por detrás de un Verstappen que no podía relajarse.

Mientras, pilotos y equipos debatían si cambiar los neumáticos intermedios o pasar a los de piso seco, ya que algunos tramos del trazado continuaban demasiado húmedos.

Y en cuestión de cinco vueltas Hamilton, girando a más de 1,5 segundos más veloz que el líder, se arrimó a 2,4s de Verstappen, que por radio le aseguraba a su equipo que por el momento no quería cambiar gomas.

Hamilton giraba cada vez más rápido. EFE/EPA/DAVIDE GENNARI

Sin embargo, en la vuelta 28 debió ceder ante lo que era inevitable: con Hamilton a 1,5s, el holandés entró a boxes y modificó sus ruedas, saliendo tercero de los pits y ahora 27 segundos por detrás del británico.

Pero la jugada, en principio, dio resultado: enseguida fue el turno de parar para Hamilton y el de Red Bull volvió a recuperar el liderazgo. De todos modos, el campeón mundial amenazaba: salió a 5 segundos y en cuestión de instantes se puso a menos de 2, con muchos rezagados en medio que no hacían más que complicar la situación.

Y al hombre de los 7 títulos mundiales se le complicaron demasiado. En la vuelta 31, en un intento por dejar atrás a uno de los pilotos que debía superar, Hamilton pisó el agua con los neumáticos secos y se fue de pista. Pudo volver a la misma, pero perdió muchísimos segundos.

El golpazo que protagonizaron George Russell y Valtteri Bottas obligó a detener por completo la competencia.

A su reanudación, Hamilton se colocó sexto, pero a casi 12 segundos del puntero. Leclerc, por su parte, ​arrancó por detrás de Verstappen, pero se vio sorprendido por Lando Norris, que le arrebató el segundo lugar.

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— F1 + (@F1plus_) April 18, 2021

Entre la potencia de su Mercedes y su jerarquía, Hamilton terminó vulnerando la resistencia del también británico y se colocó segundo a pocos giros del final, posición que mantendría sin poder, claro, incomodar a un Verstappen que, escapado en la punta, terminó ganando con comodidad gracias a aquella estupenda maniobra del inicio.