Comenzó una nueva semana y los dos sectores del Frente de Todos referenciados en Cristina Kirchner y Alberto Fernández, enfrentados hace ya varios meses, dieron dos mensajes que parecieran indicar que aún hay posibilidades de una reconciliación o, al menos, demostrar que, más allá de las diferencias -algunas insalvables-, todavía se puede trabajar a la par.

El ministro más criticado por la vicepresidenta estuvo 40 minutos en el despacho del camporista: lo resaltaron como un gesto de que se puede gestionar aún con diferencias; Katopodis pidió que Fernández y Cristina Kirchner dialoguen

El encuentro se dio luego de que ambos se mostraran con el mandatario fueguino, con quien firmaron un Fideicomiso para el Desarrollo Austral (FIDA) que tiene por objetivo promover la realización de obras de infraestructura, energía, salud y comunicación en la provincia patagónica. El fideicomiso es suscripto entre el Estado Nacional -a través de los Ministerio del Interior y de Economía, la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur- y el BICE Fideicomisos.
Los fondos del FIDA se conforman con recursos del gobierno nacional y provincial, y son direccionados al financiamiento para construir obras de infraestructura de relevancia para las distintas localidades de la provincia austral.

También participaron la secretaria de Provincias del Ministerio del Interior, Silvina Batakis; el presidente de BICE Fideicomisos, Jorge Tanús; y los legisladores provinciales Mónica Acosta y Emmanuel Trentino.

Al respecto, De Pedro expresó: “Lo que impulsa una idea muy importante del presidente Alberto Fernández ligada al arraigo: que los ciudadanos y las ciudadanas que nacen en Tierra del Fuego puedan proyectarse, desarrollarse y vivir allí”.

Por su parte, Martín Guzmán celebró la firma del acuerdo para promover la inversión y el desarrollo de Tierra del Fuego, al sostener que “significa más desarrollo para la economía”. “Cuando vemos que se invierten estos fondos en obras viales, infraestructura, hospitales, en energía, es algo que celebro particularmente, dadas las tan importantes oportunidades que tiene la provincia y que enfrenta todo el país en materia de desarrollo energético”, completó.

A su turno, Gustavo Melella resaltó también la importancia del Fideicomiso para el Desarrollo Austral, ya que, indicó, “está ligado al desarrollo de la provincia”.

“El FIDA comenzó durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner, y luego fue vaciado durante la presidencia de Mauricio Macri, con implicancias muy negativas en la continuidad y el desarrollo de las obras”, cerró.

El primero en hablar en este sentido fue Gabriel Katopodis, ministro de Obras Públicas, quien en diálogo con El Destape Radio sostuvo: “Hace falta mayor poder político y una coalición más fuerte. No estamos para escuchar la opinión de Cristina Kirchner sino para que participe activamente de todas las decisiones con Alberto Fernández”.
“Hay que transmitir un mensaje de tranquilidad y esperanza a nuestra gente después de tanto agite”, pidió el funcionario, quien luego dejó una frase que podría ser anticipatoria de la reunión que se conoció horas después entre Martín Guzmán y Eduardo De Pedro: “Hay que cargarlo de gestualidades que marquen que hay mucho más encuentro y coincidencias que las (diferencias) que los medios quieren amplificar”.

Justamente esto fue lo que quisieron transmitir el ministro de Economía, principal apuntado de la Vicepresidenta y de Máximo Kirchner para dejar su cargo, y el titular de la cartera de Interior, hombre de La Cámpora y de estrecha relación con la ex mandataria y su hijo. Ambos estuvieron mano a mano durante 40 minutos luego de firmar unos convenios con el gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella.