La  presidenta Cristina Fernández se despidió ayer como mandataria ante la Asamblea General de la ONU con un fuerte reclamo al gobierno de los Estados Unidos para que informe sobre el paradero del ex agente de la SIDE Antonio “Jaime” Stiusso, a quien vinculó con irregularidades en la causa AMIA y la “muerte” del fiscal Alberto Nisman.

“Hemos citado al embajador estadounidense en nuestro país (Noah Mamet) para saber en qué calidad se encuentra este ex servicio secreto, en Estados Unidos. Él estuvo a cargo de la causa AMIA desde el primer momento, cuando apenas era una diputada provincial en la Patagonia y después cuando era convencional constituyente esta persona ya estaba a cargo de la investigación y ahora, se está comprobando su vinculación absoluta con el fiscal Nisman”, aseguró la Presidenta.

En ese sentido, reveló que “la Cancillería ha presentado dos notas y pedido de entrevistas con el Departamento de Estado (norteamericano) para requerir en carácter de qué se encuentra esta persona (Stiusso) en Estados Unidos, yo diría: ‘protegida’, no se sabe de qué, ni de quién”, ironizó.

Cristina Fernández extendió durante cuarenta minutos su último discurso ante la Asamblea General de la ONU antes de abandonar el poder, y fue aplaudida en dos ocasiones, cuando realizó un cuestionamiento al presidente los Estados Unidos, Barack Obama, por supuesta “complicidad” con Irán y cuando celebró el fin del conflicto entre Colombia y las FARC.

En el inicio de su discurso, se mostró satisfecha por lo que consideró “el triunfo” de la resolución que impulsó su gobierno ante la ONU, que limita el accionar de los Fondos Buitres en la reestructuración de deudas soberanas.

Tras volver a defender el polémico Memorándum de Entendimiento con Irán firmado en 2013, advirtió también sobre la existencia de “datos reveladores y estremecedores de vinculaciones” del atentado a la AMIA “con servicios secretos internacionales, cuentas en el exterior y fondos buitres”.

Allí reveló que “hace días, los fiscales a cargo de la causa AMIA han pedido a Interpol que libre orden azul, orden de paradero sobre esta persona”.

Aunque sin mencionar en ningún momento el apellido de Stiusso, la Presidenta alertó que sobre el “desplazamiento que ordené de sectores de inteligencia argentinos, por fuertes sospechas de entorpecer la investigación y oponerse a tomar declaración a los iraníes a fines del año pasado”, entre los que mencionó a “funcionarios que venían (en la ex SIDE) desde 1972 y pasaron por todas las dictaduras y los gobiernos, incluido el nuestro, y que hoy están radicados también aquí en EE.UU”.

“A pocos días de este desplazamiento -insistió-, se produce la muerte del fiscal Nisman actuante en la causa” AMIA, agregó.

Tras recordar su discurso del año pasado ante el mismo foro, en el que “sostenía que la AMIA era un complicado tablero de ajedrez de la geopolítica internacional”, la Presidenta denunció que “hoy pienso que es, además, una telaraña de intereses externos a nuestro país, donde quedan atrapados los más débiles y los más chicos, y los otros, permanecen afuera”.

“En este juicio oral que se está llevando a cabo por encubrimiento (en la Causa AMIA en Buenos Aires) luego de 14 años de demora, y también en la investigación por la muerte del fiscal Nisman, comienzan a aparecer datos reveladores y hasta estremecedores de vinculaciones con servicios secretos externos, con cuentas en el exterior, con vinculaciones de los fondos buitres, denunciados no por esta Presidenta, sino por la comunidad judía de mi país”, aseveró.

“No vengo acá con hipocresía, vengo a contar las cosas que están pasando”, enfatizó.

En su último discurso antes de finalizar su mandato, es la primera vez que la Presidenta no mencionó el reclamo por Malvinas.

Scioli: “No voy a ser un presidente de transición”

El candidato por el kirchnerismo, Daniel Scioli, negó ser un “presidente de transición” hasta un eventual retorno al poder de Cristina Fernández y aseguró que “hay cosas que requieren continuidad y otras que precisan cambios”.

“Los argentinos no quieren que haya un cambio total, pero precisan que interpretemos sus nuevas demandas. Voy a trabajar en esa dirección. Soy el candidato que transmite más confianza, más coherencia y más certidumbre”, enfatizó.

De este modo, se diferenció de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, quien expresó que el gobernador bonaerense “puede ser una transición muy constructiva para la espera del regreso” de la presidenta Cristina Fernández.

En ese sentido, dijo que esos sectores del kirchnerismo “son los mismos que decían que no me querían como candidato y que subestimaron mi trayectoria política”.