Fernando Aguirre, vocero de la Cámara y Federación Argentina de Supermercados, dialogó con FMFleming y negó que la culpa sea de las grandes cadenas. "Todos estamos enojados por los aumentos, y por la inflación que venimos sufriendo desde hace años. La gente se enoja con los supermercados, el comercio en general, que es el que les da la mala noticia de que los precios subieron. No es sólo en los alimentos", dijo. "No es cierto que los supermercados son los que se quedan con la mayor tajada. Si uno mira las cifras y compara con Latinoamérica, son muy similares. Es un problema mundial lo de la brecha entre el productor y el consumidor, pero el único lugar donde hay inflación es en la Argentina", apuntó.

Aguirre se refirió específicamente a la carne, de los que más aumentó, mientras que en Liniers muchas veces el precio de ganado en pie baja, como ocurrió la semana pasada. "Pasa también en las carnicerías, el supermercadismo vende 25% a lo sumo del consumo de carne en el país. Lo que pasa es que es muy fácil pegarle al supermercadismo, porque es muy visible, y se sabe más o menos quienes son. Pero es apenas la cuarta parte del mercado está en manos de los supermercados, porque muchos ni venden carne, como los express", señaló. "No es verdad el hecho de que las cadenas de supermercados generan la inflación, eso se produce en otro lado. Para que los precios bajen se tendría que conseguir primero que no haya inflación, y recién después verlo", agregó.

Además, el supermercadista sostuvo que las ventas están cayendo desde enero. "En enero hubo una caída superior al 4% en alimentos, según detalló la CAME. Es un problema, porque yo le vendo a la gente, me sirve que la gente tenga mucha plata, no que no haya plata para comprar". Y cerró apuntando al tema paritarias: "Estamos preocupados por la negociación por paritarias, que la gente no recupere el poder adquisitivo. Durante ocho años del gobierno anterior no se pudo hablar de inflación, y eso no lo tiene que pagar el asalariado hoy".