* Una mayor probabilidad de un ajuste monetario por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos luego de los últimos datos sólidos del empleo podría presionar a la baja a las monedas de América Latina, que este año se han beneficiado del panorama cauto del organismo.

* En México se mantiene la expectativa de que el tipo de cambio pueda debilitarse a alrededor de 20 pesos por dólar entre agosto y octubre, por la incertidumbre sobre el futuro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y el impacto del sendero alcista del dólar.

* En el plano político, la ventaja de la candidata demócrata Hillary Clinton sobre el aspirante republicano Donald Trump, un crítico del TLCAN, bajó a menos de tres puntos porcentuales, según un sondeo de opinión Reuters/Ipsos. En lo económico, más bancos de Wall Street esperan que la Fed eleve las tasas tras el fuerte reporte de empleo en julio.

* Brasil por ahora continúa dando un respiro a los operadores de América Latina, ya que el real se apreció a su nivel más firme en casi un año y medio por la mejora de las expectativas de inversiones ante los planes de ajuste fiscal del Gobierno del presidente interino Michel Temer.

* "El mercado se puso en marcha a un movimiento a la baja (del dólar) y no lo quiere soltar. Todas las casas (de cambio) están viendo mucho ingreso (de capitales) y parece que eso no va a terminar muy pronto", dijo en Brasil un operador de un banco internacional que habló bajo condición de anonimato.

* En Chile, otro operador comentó: "La tendencia de las últimas semanas ha sido una apreciación del peso con algunas pausas, dependiendo de las noticias que vengan desde afuera (...) Por lo tanto, la próxima deberíamos tener al tipo de cambio fluctuando entre los 655 y 665 pesos (por dólar)".

* En tanto, la moneda peruana operaría entre las 3,30 y 3,36 unidades por dólar en medio de la oferta de dólares de empresas de cara al pago de impuestos, la cual sería contrarrestada por una demanda de divisas de bancos debido al vencimiento de instrumentos del Banco Central.

* Mientras que el peso argentino interbancario se mantendrá estable en torno a las 15 unidades por dólar, en una plaza regulada por las inyecciones de liquidez de la banca oficial. Algunos operadores creen que la moneda se depreciará hacia las 16,30 unidades por dólar a fin de año. (Reporte adicional de Froilán Romero en Chile, Walter Bianchi en Argentina, Miguel Ángel Gutiérrez en México, Úrsula Scollo en Perú y equipo de mercados en Brasil; Editado por Silene Ramírez)

Reuters