Se terminó el tiempo de las especulaciones previas, ya es tema totalmente gastado la “batalla” perdida con respecto a las condiciones antipopulares en las que se llevará a cabo este clásico rosarino, histórico porque se jugará a puertas cerradas en cancha de Arsenal de Sarandí y también porque desde las 15.30 Central y Newell’s definirán cuál de los dos clasificará a las semifinales de la Copa Argentina, dejando eliminado al rival eterno.
A sabiendas que la frase hecha “son partidos aparte”, con la cual se describe cada enfrentamiento entre leprosos y canallas, es muy real, lo cierto es que uno de los dos llega un escaloncito por encima desde lo anímico por haber cosechado triunfos al menos como local en Superliga, mientras que el otro viene de capa caída con ocho encuentros oficiales sin triunfos. Los de Omar De Felippe arriban al derbi algo más envalentonados que los que dirige Edgardo Bauza.

De todas maneras, por el hecho que se trate de un clásico de eliminación directa en el que no hay otro camino que la eliminación de uno y la continuidad en el torneo del otro, la cautela estará a la orden del día y se aguarda un encuentro incluso más cerrado que lo habitual.

¿Qué puede pasar para que no se llegue a la previsible definición desde el punto del penal? Posiblemente, que Central lo abra con la pelota parada desde la zurda de Leonardo Gil, arma principal de un equipo con escasas y por momentos nulas ideas en ofensiva; mientras que Newell’s pondrá las fichas en la figura de Mauro Formica, el “distinto” de los 22 protagonistas que por ahora no apareció en su máxima expresión.

Colectivamente son fuerzas similares, apenas tienen pequeñas diferencias: mientras los del Patón intentan ser directos buscando el envío largo a los puntas para jugar a partir de la “segunda pelota”, los de Omar tratan de darle prolijidad al manejo de la pelota y construir de forma asociada para terminar por las bandas.

En este último aspecto, en el cómo trabajan ambos por los costados, desde hace dos encuentros el Canalla pone en cancha a volantes a pierna cambiada como Federico Carrizo por izquierda y Washington Camacho por derecha para trazar diagonales y perfilarse para su mejor perfil. La Lepra, en contrapartida, tiene en Joel Amoroso por la diestra y Héctor Fértoli en la zurda, a dos jugadores de muy buena velocidad que se ponen como principal objetivo el desborde y el centro para el solitario Luis Leal.

Al margen de este análisis previo, todo es dentro de lo ideal para unos y otros, lo potencial, lo que por breves pasajes en partidos puntuales les funcionó, pero que en definitiva han mostrado a cuentagotas y sólo si alguno de los dos logra imponer lo suyo, abriendo el marcador, hará que el otro esté en graves problemas por lo que les ha costado estar en desventaja, algo que claramente los une.

De Felippe repite el que le ganó a Tigre
Sin tomar como referencia el triunfo ante Argentinos que fue con gran mayoría de suplentes, el entrenador rojinegro pondrá en cancha a la formación que mejor rindió en los últimos días y fue en la victoria 2-0 ante Tigre por la fecha 9 de la Superliga.

Es decir, los que intentarán hacer historia y eliminar a Central serán: Alan Aguerre; Facundo Nadalín, Teodoro Paredes, Fabricio Fontanini y Mariano Bíttolo; Joel Amoroso, Hernán Bernardello, Braian Rivero y Héctor Fértoli; Mauro Formica; Luis Leal. 

Bauza repite el once que cayó ante Patronato
El Patón decidió repetir al mismo equipo que jugó el día domingo en Paraná, y ratificó que continuará el 4-4-2, por lo que Maximiliano Lovera aguardará en el banco de suplentes.

De esta manera, los once auriazules que buscarán el pasaje a semis serán: Jeremías Ledesma; Gonzalo Bettini, Matías Caruzzo, Marcelo Ortíz y Alfonso Parot; Washington Camacho, Leonardo Gil, Néstor Ortigoza y Federico Carrizo; Germán Herrera y Fernando Zampedri. 

En el último, gritó Central
Casi 11 meses atrás, el 10 de diciembre de 2017, el Canalla que dirigía Leo Fernández se impuso 1-0 al Newell’s de Juan Manuel Llop en el Gigante con gol del Chaqueño Herrera a los tres minutos de comenzado el encuentro.