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20 de agosto de 2019

Como desarrollar todo nuestro potencial

Ayudar a los demás a desarrollar todo su potencial.

Por: Redacciòn FM Fleming"Magazine"

El crecimiento personal nos permite mejorar nuestras relaciones, expandir nuestros horizontes y volvernos personas más efectivas.

El crecimiento personal intencional es el camino para desarrollar nuestro potencial; pero requiere que tomemos la decisión consciente de asumir la actitud, la pasión y la personalidad correcta para desarrollar nuestras habilidades especiales. El crecimiento personal nos permite mejorar nuestras relaciones, expandir nuestros horizontes y volvernos personas más efectivas.


Si queremos alcanzar nuestros objetivos y nuestro potencial, debemos aplicar los 15 principios del crecimiento intencional: 

1. Un líder intencional
El crecimiento personal no ocurre automáticamente ni por accidente. Debemos planificar los pasos necesarios para lograr un crecimiento intencional. Asimismo, debemos asumir toda la responsabilidad de nuestro propio progreso. Es importante que no caigamos en la trampa de algunos errores muy comunes:


– No sé cómo crecer: debemos empezar por pensar quién queremos ser. Luego, debemos escribir los pasos que debemos dar a partir de hoy para llegar a ser dicha persona.
– Este no es el momento más idóneo para crecer: el momento más idóneo para crecer es ahora mismo.
– Temo cometer errores: todos cometemos errores; debemos aprender de los mismos.
– Debo encontrar la mejor manera de crecer antes de empezar: primero debemos tomar el camino del crecimiento.
– No me provoca: crecer es mejor que estancarse. Debemos pasar por lo menos un año dedicados a nuestro crecimiento.
– Los demás son mejores que yo: está bien. Pero podemos aprender de los demás.
– Pensé que sería más fácil: nada bueno es fácil.
Debemos dejar de lado estos prejuicios y empezar a crecer. Para empezar, debemos preguntarnos hacia dónde queremos ir. Tras responder esta pregunta, debemos empezar el viaje hacia nuestro destino.

2. Desarrollar autoconsciencia
No podemos crecer si no sabemos quiénes somos, si no identificamos nuestras fortalezas, debilidades y pasiones. Debemos empezar un proceso de autodescubrimiento. Debemos pensar en profundidad quiénes somos y a dónde queremos llegar.
¿Nos gusta lo que estamos haciendo ahora mismo? Si no, debemos arriesgarnos a probar algo diferente. Podemos preguntarnos: ¿Qué quisiera hacer? No podemos llegar a nuestro destino si trabajamos en algo que detestamos. Así pues, debemos decidir qué queremos hacer, analizar por qué lo queremos hacer y ponernos en camino.

No podemos crecer si no sabemos quiénes somos, cuáles son nuestras fortalezas, debilidades y pasiones


3. Creer en uno mismo
Buena parte de las personas nunca alcanzan todo su potencial porque tiene poca autoestima. No creen que merecen crecer. Dado que se consideran defectuosas, estas personas no pueden imaginar que están en una mejor situación. Si esta es nuestra situación, debemos cambiar de mentalidad.
Para mejorar nuestra propia imagen, es importante que evitemos una excesiva autocrítica. Las personas conversan constantemente consigo mismas. Aquellas con baja autoestima suelen criticarse a sí mismas.
Es mejor que no entremos en autoconversaciones negativas. Más bien debemos compararnos con nosotros mismos. Celebrar las pequeñas victorias. Recordar que cada pequeño paso nos acerca un poco más al éxito. Siempre debemos ser positivos. Debemos ser nuestros mejores amigos.

4. Reservar tiempo para la reflexión
El crecimiento personal implica hacer una pausa y pensar cuidadosamente en nuestra vida. Debemos buscar un lugar en el que podamos detenernos a reflexionar; quizá un lugar alejado o una habitación silenciosa. Luego, podemos reservar de 10 a 30 minutos cada día para pensar en nuestra vida y en el tipo de crecimiento personal que queremos lograr. Debemos planificar períodos regulares de introspección cada semana. Es importante que pensemos con cuidado en las áreas en las que debemos desarrollarnos y crecer.

5. Ser disciplinado a diario
El crecimiento personal implica tiempo, trabajo duro y constancia. Sin disciplina, no es posible crecer ni lograr nada valioso. Se necesita de un gran esfuerzo.
Estas son las diversas facetas del crecimiento personal:
– Qué: no basta con tener un fin. También debemos saber qué es lo que debemos mejorar.
– Cómo: la decisión de seguir adelante tiene cuatro aspectos. Debemos:

1) asegurarnos de que nuestra personalidad se corresponde con nuestra motivación;
2) empezar poco a poco
3) ser pacientes;
4) disfrutar cada minuto de nuestro viaje de crecimiento.

– Cuándo: ahora mismo. Esta es la mejor respuesta.

Sin disciplina, no es posible crecer ni lograr nada valioso.


6. Buscar un clima positivo
Si queremos circunstancias que favorezcan el crecimiento personal, debemos propiciar un clima idóneo. Por tanto, debemos analizar el mundo que nos rodea para determinar si este propicia o evita nuestro crecimiento. Si estamos rodeados de circunstancias negativas, debemos buscar un clima más positivo.
El clima no solo tiene que ver con el lugar. También incluye a las personas que nos rodean. El psicólogo David McClelland explica que las personas con las que nos pasamos el tiempo influyen en 95% la posibilidad de que tengamos éxito o fracasemos. Por tanto, debemos rodearnos de personas que nos impulsen; no que nos retengan.

7. Ser muy estrategas
Algunas personas asumen el control de su vida. Otras dejan que la vida les pase por encima. En vez de esperar que las cosas sucedan, debemos tratar de desarrollar una mentalidad estratégica que nos permita operar con un claro sentido de urgencia con respecto a llevar una vida satisfactoria.
Debemos entender que la vida implica un enfoque proactivo si queremos que ésta sea satisfactoria. Ser estratega significa diseñar nuestra vida.

En vez de esperar que las cosas sucedan, debemos ser proactivos y provocarlas nosotros.
 

8. Convertir lo negativo en positivo
Todos tenemos problemas. Pero algunas personas que han pasado por malos momentos aseguran que lidiar con sus problemas los hizo convertirse en mejores personas. Mientras tanto, sus experiencias negativas se vuelven positivas.
Debemos seguir cinco pasos para convertir nuestro dolor en ganancia:

– Asumir una posición positiva en la vida: el optimismo debe ser nuestro marco de referencia básico.
– Acoger y desarrollar nuestra creatividad: ante los problemas difíciles, requeriremos de soluciones poco ortodoxas.
– Aceptar el valor de las malas experiencias: debemos aprovechar cada situación para aprender y crecer.
– Hacer cambios después de aprender de las malas experiencias: los traumas pueden servir como puntos de inflexión.
– Asumir la responsabilidad de nuestra vida: solo nosotros podemos estar a cargo de nuestra existencia; nadie más.

9. Crecer de dentro hacia afuera
La mayoría de las personas destinan más tiempo y atención a desarrollar sus habilidades que a desarrollar el carácter. Sin embargo, el verdadero problema es la falta de carácter. No debemos preocuparnos por nuestra apariencia. Lo importante es nuestro interior.
Nuestras «victorias internas» son siempre más importantes que los triunfos externos. Por lo general, no podemos controlar lo que sucede en el exterior; pero sí podemos controlar lo que sucede en nuestro interior. Cuando se trata de problemas de carácter, nunca debemos tomar el camino más sencillo.

No podemos controlar lo que sucede en el exterior; pero sí lo que sucede en nuestro interior.
 

10. Acostumbrarse a estirarse
Las cuerdas de goma son útiles solo cuando se estiran. Las personas son como las cuerdas de goma. Si quieren alcanzar todo su potencial, deben ir más allá de sus límites: físicos, mentales, emocionales y espirituales. Buena parte de las personas no se estiran lo suficiente. Aceptan el status quo y se mantienen estancadas en sus zonas de comodidad. Esto dificulta el crecimiento personal. Si nos queremos estirar, debemos estar listos para el cambio.

11. Una cosas por otra
Nunca podremos encontrar el tiempo y la energía para crecer si no estamos dispuestos a negociar una cosa por otra. Esto puede implicar cambiar de trabajo, dejar la seguridad de un salario, cambiar de comunidad o hacer otros sacrificios necesarios.
Cuando vayamos a dar una cosa por otra, debemos tomar en cuenta dos situaciones:
1) debemos determinar los pros y los contras. Esto nos puede ayudar a determinar si tendemos por lo general a sobrevalorar lo que ya tenemos o a menospreciar lo que podríamos ganar.
2) debemos determinar si cambiaremos a través de dicho cambio.

12. Aprender a hacer más preguntas
El crecimiento intencional depende en parte de obtener más conocimientos. Mientras más aprendamos, más podremos crecer. No tenemos que ser expertos. Podemos asumir una mentalidad de principiantes. Debemos aproximarnos al conocimiento con curiosidad y ser siempre inquisitivos.

13. Buscar un buen mentor
Las personas que tienen una experiencia sólida nos pueden enseñar mucho. Cuando nos acerquemos a un mentor, debemos escoger a alguien que respetemos y que valga la pena emular. Además, esta persona debe tener el tiempo para ayudarnos con regularidad. No es necesario que el mentor forme parte de nuestra organización.

14. Aumentar nuestro potencial
¿Hemos alcanzado todo nuestro potencial? ¿Podemos crecer más? Por supuesto, todos podemos crecer más al desarrollar nuestras ideas y acciones.
Es importante que no nos preguntemos si podemos o no; debemos preguntarnos cómo hacerlo. La primera pregunta nos limita; en cambio, la segunda nos acerca a posibilidades asombrosas.

15. Ayudar a otros a desarrollar todo su potencial
Mientras más demos, más obtendremos de vuelta. Mientras más crezcamos, más podremos dar. Debemos aprovechar nuestro tiempo para ayudar a los demás a desarrollar todo su potencial. Bien sea en casa o en el trabajo, debemos poner a los demás en nuestra agenda. Nuestra familia debe estar antes de nuestros deseos.



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