El año 2017 llegará con un importante desafío a nivel técnico: Los máximos que ha roto una y otra vez Wall Street, al encadenar casi ocho años al alza. En ese sentido, los analistas coinciden en señalar que es probable que el 2017 venga con alguna corrección bajo el brazo, que se producirá más tarde o más temprano. "No es sostenible en el tiempo un periodo de subidas desde 2009. No hay otro remedio que caer. Auguro una corrección cuantiosa en Wall Street", dijo el analista técnico Roberto Moro en Zona de Trading.

La cuestión es saber cuándo se producirá ese movimiento de caídas. En ese sentido, hay una cierta unanimidad entre los analistas que intervinieron en la primera mesa de debate del evento. José S. Lizán, gestor de Auriga Global Investors, pronosticó que el ejercicio comenzará con buen tono en los mercados, que se pondrá a prueba en la primavera, coincidiendo con las elecciones en Francia y el final del programa de compra de bonos del BCE, que impactará muy negativamente en el mercado de deuda. "La primavera va a ser un punto muy caliente. Tendría mucho cuidado con los bonos. Va a ser un año de idas y venidas fuertes", advirtió este especialista. Lo mismo opinó Eduardo Faus, analista técnico de Renta 4 Banco: "La tendencia es alcista clara, pero llevamos muchos años sin una recesión. Por eso, el movimiento en Estados Unidos es peligroso a largo plazo. Pero todavía le queda terreno en los meses inmediatos".

A juicio de Lizán, lo que falta en Wall Street para poner punto y final a la tendencia alcista es ese periodo de exuberancia irracional que suele poner broche a estas fases: esos momentos en los que los resultados empresariales no acompañan a las subidas de las cotizaciones por buenos que sean. Una vez que se dé esta exuberancia irracional, vendrá "un sell off importante de bonos y de compañías de crecimiento". Por eso, este experto aconseja ir deshaciendo posiciones en este tipo de empresas y en las que estén muy ligadas a los bonos, como las utilities.

En cuanto a la bolsa española, hay menos unanimidad. Alberto Chán, miembro de la oficina de trading de GKFX España, apuntó que la bolsa española es el mercado con más potencial. Pronosticó que el Ibex va a vivir una corrección inicial que le situará en el entorno de los 8.000 puntos, para "luego ir a atacar resistencias en los 9.200 puntos, el principal nivel que ha estado probando este año, con el objetivo en los 10.000 puntos". Según explicó Chán, esa corrección inicial hasta los 8.000 puntos es necesaria para que el mercado coja fuerza para afrontar la subida. "El año que viene va a ser alcista en bolsa, pero hace falta una caída previa", aseveró. Por eso, aconsejó a los inversores que no entren aún en bolsa española. "Hay que esperar. Podrían faltar 500 puntos de caída a la bolsa española", apostó.

 
Esta subida podría suceder antes de Navidad y coincidir con el famoso "rally" de esta época de año si en los próximos días se produce la citada corrección. En todo caso, Chán advirtió a los inversores ante ciertas ideas que suelen circular en el mercado a este respecto: "Que no nos vendan que si no entro ahora se me puede escapar la gran oportunidad del rally navideño. Yo esperaría a un shock en el mercado, un momento de pánico con caídas del 4 por ciento diario. Y ahí se va a abrir la ventana a nivel del sector español. Estamos en un mes en el que se pueden abrir oportunidades para posicionarnos largos de seis meses", opinó este especialista. 

Por su parte, Eduardo Faus cree que podemos estar ante una oportunidad de entrar en valores muy sobrevendidos, como Dia, Telefónica, Red Eléctrica y otras "utilities", por no hablar de la banca, "que está haciendo un goteo bajista, con divergencias, que es típico antes de un movimiento alcista". " Yo creo que vamos a intentar otra vez los 9.200" puntos, lanzó este experto quien, no obstante, reconoció que, dada la congestión que vive el selectivo -atascado en torno a los 8.600 desde hace semanas- podría "ocurrir cualquier cosa".

Por este motivo, Roberto Moro no abriría largos en el índice en estos momentos. Si bien, puntualizó que si el DAX sube por encima de los 11.000 puntos, sí compraría ese índice, el Nasdaq 100, valores concretos de ese índice, el Ibex, e incluso entidades financieras, puesto que "el aspecto del índice sectorial bancario no es feo".

Imagen:De izd.a a dcha. José Jiménez, Alberto Chan, Roberto Moro, José Lizán y Eduardo Faus

Fuente: Marìa Gòmez Silva